Algunos paseantes que ayer decidieron estrenar el recién inaugurado paseo de la ría de Avilés a su paso por La Marzaniella, en Trasona, se percataron de la existencia de un vertido de un color blanco intenso que asomaba en una de las márgenes del estuario. Algunas de las personas que se dieron cita en la senda achacaron el vertido a una arqueta propiedad de Du Pont aunque, por el momento, nadie pudo confirmar con seguridad la procedencia del derrame en cuestión. La proximidad de la senda de la ría a las instalaciones de Arcelor-Mittal hizo pensar a los caminantes que se trataba también de un vertido procedente de la multinacional siderúrgica, informa Illán GARCÍA.