Teresa CEMBRANOS

El consejero de Cultura, Emilio Marcos Vallaure, cuestionó ayer la funcionalidad de los edificios del Centro Cultural Internacional Avilés, antes Centro Niemeyer, y criticó las limitaciones que hay en alguno de ellos para albergar diversas especialidades artísticas. En ese sentido, explicó que el Principado de Asturias está llevando a cabo una inspección técnica de los edificios para evaluar sus fallos y problemas y buscar soluciones.

Lo que por el momento ya tiene claro el responsable cultural asturiano es que la cúpula del Niemeyer es incompatible con la exposición de cuadros y fotografías debido a cómo está construida. «Desde el primero momento tuvimos claro las dificultades para exponer otra cosa que no sean esculturas o proyectos de imagen y sonidos, así que hemos decidido que el vestíbulo del auditorio tiene más oportunidades para la exposición de cuadros y fotografías, aunque también vemos que hay problemas con la luz», explicó ayer Marcos Vallaure durante la presentación de la exposición de la avilesina Soledad Córdoba. No obstante, los anteriores gestores del complejo de la ría sí dieron uso museístico a la cúpula y así se pudieron ver, por ejemplo, varios cuadros del artista asturiano Hugo Fontela.

Los técnicos regionales revisan también las instalaciones del auditorio, que cuenta, según Marcos Vallaure, con problemas de acústica. También hay otra circunstancia criticada: el edificio carece de foso, indispensable para conciertos con orquesta, por ejemplo.

«Faltan varios elementos en el auditorio», comentó ayer el consejero. El responsable de la cultura regional explicó que anteayer visitó el complejo cultural el nuevo director de la Orquesta Sinfónica del Principado de Asturias (OSPA), el maestro búlgaro Rossen Milanov. «Ha visto posibilidades en el terreno de la danza», reconoció Marcos Vallaure.

El consejero de Cultura declinó ayer hacer referencia alguna a los «roces» que hay entre el Principado de Asturias y el Ayuntamiento de Avilés a raíz de la polémica del Centro Niemeyer y las supuestas irregularidades cometidas por la Fundación. No obstante confió en que esos «desencuentros» queden atrás y «se reconduzca la situación con la administración local».

Sobre la marcha del ex director de la Fundación del Niemeyer, Natalio Grueso, a Madrid para coordinar todos los teatros municipales y centros culturales de la capital, Emilio Marcos Vallaure pasó palabra: «No tengo opinión sobre ese tipo».