Piedras Blancas,

Inés MONTES

La crisis económica y la suspensión del plan de empleo público son las causas que impiden la apertura de las oficinas de información turística del concejo, según explicó el concejal de Turismo y Festejos de Castrillón, Enrique García. La oficina de Piedras Blancas, ubicada junto al Ayuntamiento, está cerrada desde hace meses, cuando concluyó el contrato del beneficiario del plan de empleo que la atendía, y la de Salinas desde que finalizó la pasada temporada estival. Así las cosas, el gobierno municipal de IU se plantea abrir solo una oficina el próximo verano, entre el 15 de junio y el 15 de septiembre, lo que dura la campaña estival oficial.

«Solo tenemos presupuesto para abrir una oficina de turismo en verano probablemente será la de Salinas», indicó Enrique García. Si finalmente el gobierno local opta por la oficina de la capital turística castrillonense, volverá a cambiar de ubicación y regresará a la locomotora «Rojillín». Desde el verano de 2010 la ventanilla de información para turistas estuvo ubicada en la calle Galán de Salinas, en un edificio de propiedad municipal que también fue sede de la oficina del consumidor. «Queremos rehabilitar la locomotora para que la oficina de turismo retorne a ella, porque está instalada cerca de la playa y en una zona de mejor acceso para los visitantes», dijo el edil.

La locomotora «Rojillín» que está ubicada en la avenida de Juan Sitges, fue donada por Asturiana de Zinc (AZSA) al Ayuntamiento de Castrillón. La máquina de tren fue construida por la empresa alemana Orenstein & Koppel en 1925. La Real Compañía Asturiana de Minas (RCAM) la utilizó en sus instalaciones de Reocín (Torrelavega). Adosada a la máquina se conserva un vagón de un metro de ancho de vía que fue construido en 1950 y que es el que está habilitado como oficina de turismo.

La locomotora pasó a ser de propiedad municipal en 1982 ya que estaba en el lote de cesión que AZSA realizó al Ayuntamiento para zanjar las deudas que mantenía con el Consistorio. El tren estuvo años en la zona exterior del Ayuntamiento, en Piedras Blancas, pero cuando se derribó el edificio a principios de la década de los noventa del pasado siglo, se trasladó a Salinas.

Las oficinas de información turística del concejo atendieron durante los meses del pasado verano a más de 6.000 visitantes. Además, las personas que atendieron los locales realizaron envíos de folletos a los turistas que los solicitaban por correo y a oficinas de turismo de otras localidades de la geografía española y europea.