Myriam MANCISIDOR

Man Ray adoptó el cuerpo como soporte allá por 1920 cuando fotografió a Marcel Duchamp con la cabeza rapada y una estrella de cinco puntas. Ray firmó así su carácter transgresor y la búsqueda insaciable de nuevos estilos que ahora, un siglo después, parecen seguir artistas como la fotógrafa Soledad Córdoba. Esta joven avilesina inauguró ayer en el Centro Cultural Internacional Avilés la muestra monográfica «Cuerpo, lugar, silencio» que podrá visitarse hasta el 17 de junio en el complejo cultural. «Toda mi obra la vislumbro como un viaje hacia la incertidumbre cuya guía es la intuición, la esperanza y la fe de encontrar el secreto escondido en nosotros y en todo lo que acecha a nuestro encuentro», explica la fotógrafa, que protagoniza todas y cada una de las imágenes que forman la muestra «creando una combinación de emociones que presentan una imagen universal del ser humano».

Soledad Córdoba estuvo arropada ayer en la inauguración de la muestra por el consejero de Cultura, Emilio Marcos Vallaure (FAC) y la alcaldesa avilesina, Pilar Varela (PSOE), entre otros. Ambos coincidieron en la «tremenda calidad artística» de esta mujer, que ya en 2002 expuso su trabajo en la casa municipal de Cultura de Avilés. Precisamente al Centro Cultural Internacional Avilés, Córdoba trae el trabajo que desarrolló en la última década. Vallaure incidió en que la exposición de la artista avilesina es la primera que se inaugura en «la nueva fase del centro». «De esta primera exposición no hay nada que esperar: tiene una calidad tremenda, Soledad es una artista estupenda. Espero que le guste a la gente, el arte tiene que verse, debe entrar por los ojos. Y en este caso nos permite reflexionar sobre el mundo de Soledad Córdoba, un mundo muy importante para la plástica asturiana y española», subrayó el consejero de Cultura, que recalcó: «Aquí tenemos a una artista de primerísima calidad, eso es lo que queremos para el centro».

Pilar Varela, que dijo acudir por primera vez invitada al complejo cultural, destacó por su parte que Soledad Córdoba representa a «una generación de personas jóvenes extraordinarias con muchísimo talento». «Me parece muy bien que el Centro Niemeyer sea un lugar de atracción de talento y si hablo por esta exposición creo que se mantiene la calidad, por lo que espero que muchas personas vengan a ver la exposición y la disfruten», precisó. Soledad Córdoba, entre tanto, explicó su obra, que carece de un orden cronológico estricto. «Para mí exponer siempre es una responsabilidad, pero en este caso aún más por el añadido de que estoy en mi ciudad», dijo la artista.

La muestra de Soledad Córdoba se podrá visitar todos los días de la semana de once de la mañana a dos y media de la tarde y de cuatro a ocho. El público podrá recorrer hoy la muestra de forma gratuita coincidiendo con la inauguración de la exposición. El resto de días la entrada general costará tres euros y la reducida, dos. Los visitantes podrán así adentrarse en el universo de esta joven que ha regresado a Avilés con sus silencios y con su lugares secretos, con su fragilidad e ingravidez.