El domingo, jornada electoral, se cumple un año de la inauguración del Centro Niemeyer. ¿Cómo iba la alcaldesa, Pilar Varela, a imaginarse la situación actual transcurrido sólo un año? Los dos baluartes de los socialistas, el complejo cultural y la futurible Isla de la Innovación se encuentran ahora acosados por un Gobierno regional que no deja en pie ni uno de los proyectos bandera del PSOE. Indirectamente, la incertidumbre electoral mantiene congelado el presupuesto del municipio y el necesario sosiego para aquel «proyecto de ciudad» que tanto aireó se ha desmoronado. Las inminentes elecciones pueden aliviar o prolongar la racha de los socialistas y también pueden tener su efecto en el futuro de Varela. La Alcaldesa fue hábil o afortunada al tomar partido por Rubalcaba y ha revalorado su posición ante la actual dirección regional socialista. Pero una debacle del PSOE dará paso a una guerra interna en la que habrá que tomar posición clara nuevamente. Aunque sea desde la resistencia, ha ganado protagonismo.