F. L. J.

El consejo de administración de la Isla de la Innovación que está convocado para las 13.00 horas de hoy tiene todos los ingredientes para convertirse en un nuevo escenario donde los representantes de las tres administraciones públicas (local, regional y estatal) se enzarcen en batallas que poco ayudan a desbloquear los verdaderos problemas de fondo que ensombrecen el futuro del proyecto, concebido en tiempos de bonanza económica para reordenar urbanísticamente una superficie de 570.000 metros cuadrados a caballo entre las dos orillas de la ría de Avilés.

La reunión de los consejeros llega precedida por el sorpresivo anuncio del Estado, aún apenas explicado, de «desinvertir» en la sociedad. También estará marcada por los rifirrafes que protagonizaron la semana pasada los responsables municipales y los del Principado a santo de la supuesta opacidad y la «chapucera» gestión llevada a cabo por el PSOE hasta la fecha en todo lo que rodea a la Isla de la Innovación. A este respecto, el Viceconsejero de Fomento, Juan Vega, acusó al anterior Gobierno asturiano, con Vicente Álvarez Areces de presidente, de haber tratado de convertir «lo público en privado» y de «cuestionables» facturaciones realizadas «a dedo» y por importe de 450.000 euros.

A todo esto, desde el gobierno socialista de Avilés se ha replicado que el Ejecutivo de Foro ha encontrado en la Isla de la Innovación una nueva diana para cebarse con Avilés y que el Estado «ignora» el verdadero objetivo del proyecto, por lo que el deseo de abandonarlo es «un error».