Verdicio, Illán GARCÍA

La parroquia de Verdicio contará con un campo de golf, aunque no se sabe cuando ya que el proyecto tendrá que esperar a que remonte la crisis económica. Este plan urbanístico ha sido objeto de años y años de polémicas vecinales y políticas que se han zanjado, a priori, tras la aprobación definitiva del Plan Urbano en el que estaba incluido. El equipo de gobierno, en manos del PP, afirma no tener prisa por comenzar a desarrollar este ámbito urbanístico que traerá consigo la construcción de 230 viviendas unifamiliares.

Los populares aseguran que el documento se ha aprobado en un buen momento ya que una vez que la recesión sea agua pasada, Gozón estará «en los puestos de salida» al tener ya definido el planeamiento de cara al futuro. Esta afirmación es aplicable para el plan de Verdicio y también para el desarrollo industrial del concejo con la ampliación del área de Maqua y la construcción de otro polígono en Bardasquera (Santiago de Ambiedes), según defendieron desde las filas del partido del gobierno.

Las dudas que ha suscitado el proyecto del golf de Verdicio desde el principio ya se han apagado. Ahora, sólo hay que esperar a los inversores. El Ayuntamiento quiere desarrollarlo y está abierto a escuchar ofertas aún siendo conscientes de las dificultades económicas. Lo que el PP sí tiene claro es que el plan urbanístico de Verdicio va a reforzar la apuesta del gobierno por «un turismo de calidad» asociado a la fijación de población que los populares pretenden realizar en la parroquia con la construcción de las viviendas incluidas en el proyecto. La unión de esas dos variables -turismo de calidad y fijar población- es una de las bazas con las que el Ayuntamiento juega para generar más riqueza en el concejo.

La apertura en Avilés de un centro cultural de ámbito internacional ha hecho pensar a los gozoniegos la posibilidad de llegar a establecer paquetes turísticos en el que se incluya una visita al campo de golf y un pase para las actividades que se puedan llegar a realizar en el Niemeyer una vez que en Verdicio se pueda hacer «birdie».

Realmente, todo está en el aire y depende de las circunstancias económicas. Aún así, el PP lleva años con este proyecto de campo de golf en la cabeza. De hecho, en 1994, los populares ya planteaban en su programa la construcción de instalaciones deportivas de este tipo en el concejo. Lo que a mediados de los años noventa era tan solo una idea, se comenzó a desarrollar firmemente en el primer mandato de Salvador Fernández como regidor del concejo, entre el año 2003 y 2007. Entonces, se comenzaron a dibujar las primeras líneas de un proyecto que llegaba a plantear incluso la construcción de cuatrocientas viviendas unifamiliares y dos hoteles además de un campo de 18 hoyos en Verdicio. Paralelamente, se planteaba la posibilidad de otro campo de golf en Peroño, hoy en día descartado por el Principado al afectar a terrenos afectados por el plan del litoral.

Volviendo al plan de Verdicio, en un principio, el PP decidió realizar un plan especial, es decir, un convenio al margen del Plan General de Ordenación Urbana. La Comisión de Urbanismo del Principado de Asturias (Cuota) desestimó tal proyecto y pidió al Ayuntamiento que lo incorporara al Plan General. El Ayuntamiento así lo hizo, pero sin embargo, la Cuota volvió a tumbar ese plan, principalmente, por el alto volumen edificatorio. El Principado obligó a realizar una serie de modificaciones que derivaron en que las viviendas unifamiliares previstas se quedasen en la mitad.

Por otro lado, el PP destacó que de los 80 kilómetros cuadrados de superficie del concejo, 25 kilómetros son espacios protegidos próximos a la línea costera. El gobierno se queja de que la administración regional no ha compensado a los gozoniegos con inversiones de ningún tipo. Ahora, sin embargo, se ha dado un giro a esa situación con la puesta en marcha del planeamiento que permitirá, a juicio del equipo de gobierno, un cambio sustancial en la economía del concejo y potenciar así el sector turístico, en el caso del campo de golf de Verdicio y sus viviendas, y el industrial, con la ampliación del polígono de Maqua y el proyecto para habilitar suelo para empresas en Bardasquera.

Todo ese giro ha venido motivado, defiende el PP, por su papel en la defensa de un Plan Urbano que se comenzará a aplicar en tanto en cuanto se comience a vislumbrar una luz al final del túnel de la crisis económica y financiera. Una vez solucionado este entuerto, el gobierno confía en que el sector empresarial apueste por desarrollar el «campo de golf que cambiará al concejo».