E. C.

El ex director del teatro Palacio Valdés, Antonio Ripoll, continuará vinculado a la actividad cultural del Ayuntamiento avilesino tras su jubilación y al menos durante unos meses. El que fue el artífice de los años dorados del teatro local seguirá, de momento, supervisando la programación escénica que dejó en marcha antes de jubilarse, con 70 años, el mes pasado. Tal y como ya adelantó LA NUEVA ESPAÑA, el Ayuntamiento avilesino quiere buscar una fórmula que permita seguir compatibilizando la jubilación de Ripoll con tareas de asesoramiento en el coliseo avilesino. Ya en su día el Pleno del Ayuntamiento acordó por unanimidad concederle la prórroga laboral durante los cinco años acordados por ley y ahora con su jubilación comenzaron a escucharse voces reclamándolo como asesor cultural, dada su reputación y experiencia.

La propia Alcaldesa de Avilés, Pilar Varela, aseguró ayer que esa vinculación existirá. «Ripoll seguirá colaborando con nosotros, así es su deseo y también el nuestro», afirmó. Además también subrayó que «la programación seguirá con el mismo nivel de calidad que hasta el momento» para que la ciudad mantenga el listón como «referente teatral». Varela, que realizó estas declaraciones en una entrevista radiofónica, no concretó la fórmula que seguirá para prolongar su actividad: asesoramiento puntual o algún tipo de acuerdo laboral compatible con la jubilación. El peso de la programación del Palacio Valdés recaerá ahora sobre Julia Rodríguez quien, como coordinadora de centros, asumirá esta tarea.

El responsable de Cultura ya realizó el nombramiento provisional para Julia Rodríguez, en el que se explicitan sus nuevas atribuciones. El trámite será oficial cuando se apruebe la modificación de la relación de puestos de trabajo del Ayuntamiento, en el marco también de la aprobación de los nuevos presupuestos.

La jubilación de Ripoll supondrá también un nuevo organigrama en el área de Cultura. La idea del gobierno es poner en marcha un núcleo de gestión integral en torno a la Factoría Cultural y que se encargaría de las tareas comunes, como personal, presupuesto, mantenimiento y contrato de servicios. La actual directora, de la Factoría, Anabel Barrio, se dedicará a la coordinación pedagógica y de creación. Otro funcionario será el responsable de los temas burocráticos y de la musealización. Además se va a convocar un concurso oposición para cubrir la plaza de bibliotecario que también ostentaba Antonio Ripoll, y una persona entrará por contrato relevo para ocupar la plaza de secretaria técnica que deja vacante Zaida González con su jubilación.

Uno de los objetivos que plantea el gobierno avilesino es que la Fundación de Cultura recupere iniciativas culturales que habían ido quedando en manos del servicio de Promoción Cultural, integrando en un único grupo de trabajo las actividades culturales que se estaban realizando. Plasmar todos estos cambios supondrán un movimiento de plantilla que se llevará para su aprobación al Pleno municipal. El gobierno integrará el área de Promoción Cultural en la Fundación de Cultura y no habrá un funcionario de referencia como lo venía siendo Ripoll, sino un responsable político.