Myriam MANCISIDOR

Los integrantes de la Corriente Sindical de Izquierda (CSI) protagonizarán mañana, jueves, una concentración en el Juzgado en apoyo a una representante de la central, Marisa Suárez, que el pasado mes de enero fue despedida por la empresa «Valoriza», según comunican fuentes de CSI mediante un comunicado. «Valoriza», puntualizan, es una empresa perteneciente al grupo Sacyr-Vallehermoso «subcontratada por el Gobierno regional en los centros de atención a personas mayores, con un coste público de unos cinco millones de euros». Añaden: «Esta empresa despidió por bajo rendimiento a Marisa, de 59 años de edad, con una discapacidad del cincuenta por ciento y con varios familiares a su cargo, uno de ellos en silla de ruedas. En el momento del despido, la trabajadora se encontraba de baja por un accidente laboral, que la empresa no quiere reconocer y pretende hacer pasar por una baja por enfermedad».

Los sindicalistas aseguran que «Valoriza mantiene unas condiciones laborales ilegales en el centro geriátrico de los Canapés, la trabajadora lo denunció y ahora la firma quiere reprimir y castigarla por la defensa de los derechos laborales que estaba realizando en dicho equipamiento». CSI afirma que este despido «es el primer paso de la empresa en el despido de más trabajadores y en la precarización de las condiciones de trabajo». De ahí que CSI haya iniciado medidas jurídicas «para que se readmita a Suárez y se recuperen los derechos de los trabajadores».