Mónica G. SALAS

Para que el corazón goce de buena salud es fundamental realizar ejercicio, a ser posible actividades aeróbicas. Así, caminar rápido un mínimo de media hora al día y realizar deporte sobre la bicicleta o en la piscina al menos tres días a la semana son actividades que benefician al órgano musculoso del que depende el sistema circulatorio. Así lo dio a conocer ayer la cardióloga Laura María García, del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), en la inauguración del curso «Cuida tu corazón. ¡Haz deporte!» organizado en Avilés por la Universidad de Oviedo.

«La actividad aeróbica es la más saludable. La estática, como levantar pesas, tiene riesgos a nivel cardiovascular», manifestó la especialista, que incidió en que para practicar deporte hay que tener en cuenta factores internos como la genética, el sexo o la edad y también externos como la intensidad y la duración de los ejercicios. «De nada sirve que alguien se proponga subir escaleras dos días y el resto de la semana vaya en ascensor», dijo. Señaló, a su vez, que los deportistas de alto nivel que abandonan sus entrenamientos también sufren riesgo cardiovascular. Y puso como ejemplo el caso del futbolista Maradona.

Para Laura García, no obstante, el secreto para que el corazón dé buenas palpitaciones es la práctica de ejercicio constante. «En cualquier caso, hay que evitar el sedentarismo», concluyó la especialista del HUCA.