Francisco L. JIMÉNEZ

Una mujer de aproximadamente cuarenta años, natural del barrio antiguo del Nodo y residente en la parte nueva del poblado, tuvo que ser trasladada ayer al Hospital Central de Asturias para que los médicos del área de Maxilofacial le curasen las graves heridas que presentaba en la cara como consecuencia de una serie de golpes que le propinó en plena calle un hombre al que, según testigos presenciales, no conocía de nada.

El agresor, descrito como un chico de casi dos metros de alto y gran envergadura, la emprendió a puñetazos con la mujer «con una brutalidad inusitada», según recalcaron varios testigos, en el transcurso de un rifirrafe verbal que la víctima tuvo con una vecina -al parecer la madre del joven que propinó la paliza- de la avenida de Alemania a cuento del uso que se hace de unos jardines sitos en las proximidades de la rotonda que conecta la calle de Pruneda con la subida a San Cristóbal y la avenida de La Constitución.

En el momento de este suceso, en torno a las dos de la tarde de ayer, la víctima estaba tomando un aperitivo en una cafetería de la zona con una amiga y sus hijos, ambos menores de edad, jugaban en la acera. En un momento dado, una vecina del inmueble recriminó a las mujeres el comportamiento de uno de los niños, al que acusaba de haberla insultado. Asimismo, esta vecina trató de hacer ver que el tramo de la calle donde estaban jugando los menores era de su propiedad.

En el curso de esa conversación, que según los testigos «no iba a ninguna parte», entró en escena el joven antes descrito, que sin más empujó a una de las mujeres contra una pared. Después, siempre según el relato de los testigos presenciales, «la remató en el suelo con dos puñetazos tremendos». Una de las empleadas del bar y otras personas que presenciaron el ataque intervinieron para contener al agresor, a cuyos pies yacía sangrando abundantemente por la cara la mujer golpeada. También llegaron de inmediato al lugar agentes de la Policía Nacional, que abrieron las diligencias pertinentes.

La mujer herida fue trasladada al cercano centro de salud de Sabugo, de allí al Hospital San Agustín y finalmente al HUCA de Oviedo, donde comprobaron que, como mínimo, tenía roto el tabique nasal y varios hematomas.