T. C.

La primera vez que se habló de urbanizar unos suelos en la zona denominada como el Barrial de La Magdalena fue a finales de los años ochenta. Entonces, la inmobiliaria Regueras, propietaria en ese momento de unos 120.000 metros cuadrados, presentó en el Ayuntamiento un proyecto para construir viviendas. Vista la «buena acogida», los promotores, a través de la sociedad Invacefer, continuaron comprando parcelas.

Sin embargo, el Ayuntamiento de Avilés decidió que fuera la sociedad mixta de promoción y gestión del suelo, Sogepsa, la encargada de desarrollar esos terrenos y comenzó una expropiación que nunca contó con el apoyo de los dueños tanto mayoritarios como minoritarios.

El plan residencial de La Magdalena, en el que se prevé un total de 949 viviendas, un 80 por ciento con algún tipo de protección, empezó a ser una realidad en abril de 2008. Entonces, Coprosa, adjudicataria de los trabajos de urbanización, comenzó las labores para renovar toda el área afectada, que se desarrolla en una superficie de 200.000 metros cuadrados, de los que más de 77.000 están reservados para zonas verdes, 38.000 para viales y casi 30.000 de equipamientos. La inversión prevista era de 26 millones de euros. Los primeros edificios se comenzaron a construir en el año 2010, aunque la crisis frenó la venta de las parcelas, ahora a medio gas.