Myriam MANCISIDOR

Alejandro Díaz, luanquín de 33 años y gerente del Grupo Baldajos, viajó anteayer a Cádiz sin mayor ánimo que participar en un acto presidido por los Príncipes de Asturias con motivo de la entrega del XIII Premio Nacional Joven Empresario. Y, para su sorpresa, terminó la noche charlando con don Felipe y doña Letizia de economía y de Asturias. Díaz fue el ganador del galardón que concede cada dos años la Confederación Española de Asociaciones de Jóvenes Empresarios (CEAJE).

«No tenía el gusto de conocer a los Príncipes y me parecieron personas encantadoras. Después de la cena, él me preguntó por la empresa -Grupo Baldajos- y cuando le expliqué que habíamos inaugurado hace poco instalaciones en Langreo me dijo que era una gran noticia. Doña Letizia, a su vez, me dijo eso de que los asturianos estamos en todas partes», manifestó ayer Alejandro Díaz aún con la resaca de un galardón que agradece a AJE Asturias (Asociación de Jóvenes Empresarios), a sus trabajadores, clientes y proveedores.

Este joven natural de Luanco lleva casi una década al frente del Grupo Baldajos, una firma ligada desde 1952 a Avilés y que recientemente, como bien conoció don Felipe, estrenó una nave en Langreo. La firma, con medio centenar de trabajadores -16 contratados este año- , está dedicada a la fabricación de neumáticos con un innovador sistema integral de gestión y valorización de residuos. «Cuando me dieron el premio tuve que improvisar el discurso de agradecimiento porque no tenía nada preparado, no me lo esperaba. Supongo que han premiado el trabajo de estos últimos años, la red de talleres», sentenció Díaz.

En este marco, el príncipe Felipe de Borbón animó a los jóvenes emprendedores a confiar en sus proyectos y en España y a caminar «por la senda de la excelencia». Además de premiar a Alejandro Díaz, los Príncipes de Asturias entregaron el accésit a la Labor Social a la empresaria de 30 años Inmaculada Almeida, responsable de un grupo de viajes que cuenta con más de 400 oficinas en distintos países y que, entre otras cosas, se ha caracterizado por promover la igualdad de género y la ayuda social. Álvaro Falcón recibió a su vez el accésit a la Internacionalización.

Pero el verdadero protagonista fue Alejandro Díaz, un joven de la comarca avilesina que ahora tiene un incentivo más para seguir creciendo empresarialmente: un premio principesco que, en su caso, va sobre ruedas.