Luanco,

Illán GARCÍA

El sindicato Comisiones Obreras denunció ayer que la empresa Roces, que efectúa la línea de autobús entre Avilés y Luanco, despidió a cinco trabajadores desde el pasado mes de agosto. «Fueron despedidos delegados sindicales de Comisiones Obreras y recientemente otro delegado más y un trabajador de Lino», indicó Manuel García, coordinador del servicio de Carreteras del sindicato, que calificó de «insostenible» el estado que presentan los buses y las condiciones de los trabajadores. «A algunos trabajadores se les deben unos 15.000 euros, la empresa debe estar al corriente con la Seguridad Social y con Hacienda, y eso es lo que tiene que presentar ante el Consorcio de Transportes», indicó el sindicalista.

Por su parte, fuentes del Principado aseguraron ayer que la empresa Roces aún no ha presentado los informes requeridos, todo ello pese a que el sábado finalizó el plazo. Aún queda esperar varios días en el caso de que la empresa optara por registrar los documentos requeridos en otro lugar que no fuera Oviedo. «Si el registro de presentación de los informes es anterior al fin del plazo, se aceptarán», indicaron las mismas fuentes.

Pase lo que pase, el sindicato Comisiones Obreras tiene claro que la empresa que coja el testigo de Roces, en el caso de que sea así, subrogue a los actuales conductores de la compañía. «Hay que prestar un servicio digno a los usuarios, en algunos vehículos no había calefacción, ni aire acondicionado y otros, ni frenan y además el otro día a uno se le cayó la defensa delantera», apuntó García que ve difícil que la empresa pueda recuperar de nuevo la línea entre Avilés y Luanco «tan sólo contando lo que adeuda a los trabajadores». CC OO denunció la situación de estos vehículos y las condiciones laborales de los trabajadores desde hace meses.