E. CAMPO

Oleadas de escolinos recorrieron ayer las calles del centro de la ciudad, un reguero azul y alegre, a paso vivo para conjurar la amenaza de lluvia. El tradicional desfile de escolares se volcó con el tema propuesto por los reyes del Goxu y la Faba de este año, a saber, el fondo del mar. Peces de todo tipo, medusas, neptunos, piratas, buzos, pingüinos, sirenas y Bob Esponja, entre otros especímenes, montaron la fiesta. Los más terrestres y menos acuáticos de todos, los de La Carriona, que montaron un tren minero, y los del Marcos del Torniello, vaqueros en el salvaje Oeste.

La ocasión fue buena excusa para poner en práctica los conocimientos de manualidades y reciclaje. Las bolsas de basura azules marcaron tendencia en la pasarela escolar, y las cartulinas y pinturas de dedos también hicieron furor, combinadas con imaginación y paciencia. Como complementos, turutas, batallas de confeti y animación a la carrera para terminar el recorrido sin mucha agua.

Abrieron el desfile los del Colegio Llaranes, capitaneados por su director, David Gutiérrez, que consagraron el tema marino. Detrás, para marcar contrapunto, los vaqueros y damas del Oeste del Marcos del Torniello. Varios tiburones y peces azules tomaron el mando en el Palacio Valdés, y las profundidades marinas repitieron también en la Escuela de Educación Infantil Avilés. De peces payaso azules y naranjas se presentaron los niños de Pequeños Espacios, y los del Quirinal, de medusas de largos tentáculos de plástico ondeando al viento.

Pingüinos, gentes marinas y el mismísimo Bob Esponja, que vive en una piña en el fondo del mar, desfilaron bajo el cartel del colegio Apolinar García Hevia. Y en el Colegio Principado, peces y fauna variada. Las estrellas y delfines poblaron el vestuario de los alumnos del Marcelo Gago, mientras que a los del Villalegre les salieron escamas. Entre tal fauna marina, los escolares del Enrique Alonso se presentaron vestidos de buzos, para echar un vistazo desde la escafandra a los «peces» del Luisa de Marillac. Y para cerrar, la mina. La asociación de madres y padres del Colegio La Carriona trabajó con ilusión y secretismo para confeccionar la máquina y los vagones del singular tren minero.

La marcha finalizó con una fiesta infantil en el pabellón del Quirinal. «Los Tritones», que ayer se consagraron como reyes del Antroxu, se dejaron ver entre los escolares para marcar el ritmo de la fiesta.

Los Centros de día ACD se sumaron al Antroxu con una inmersión en el fondo del mar: los usuarios realizaron diversas piezas de decoración para crear un entorno marino: corales -en la foto-, rocas, cuevas, peces... e incluso grandes medusas, todo ello con material reciclado.