El jefe de producción del Centro Niemeyer mientras dirigió el proyecto Natalio Grueso, Marc Martí, y el ex responsable del servicio de Comunicación del Ayuntamiento y cargo de confianza de la alcaldesa Pilar Varela, Julio Carretero, tendrán que declarar como imputados en la investigación judicial abierta por una serie de pagos municipales para la inauguración de la cúpula del complejo, en diciembre de 2010. El juez que instruye el "caso Niemeyer" emitió ayer un auto en el que, entre otros asuntos, ordena que ambos declaren en calidad de imputados el próximo 9 de julio. Además, el instructor ve aún prematuro pronunciarse sobre la retirada de la imputación de la Alcaldesa de Avilés y de los otros dos cargos municipales investigados, puesto que aún faltan pruebas por practicar. En este sentido, también comunicó que llamará a declarar los días 11 y 16 de julio, pero en calidad de testigos, a los 27 proveedores que supuestamente refacturaron al Consistorio de forma indebida 27 facturas por valor de 82.201 euros en 2010.
El juez no había pedido hasta el momento la práctica de pruebas. Como plantearon tanto la Fiscalía como el abogado de Foro, ve fundamental ahora llamar a Martí como imputado puesto que un extrabajador del despacho de José Luis Rebollo (exsecretario de la Fundación) aseguró en sede judicial que fue el exjefe de producción del Niemeyer quien le comunicó que debía pedir a unos proveedores que modificasen las facturas bajo sospecha. A petición de Foro, también llama como imputado a Carretero, que era el responsable del departamento municipal encargado del procedimiento administrativo para la tramitación de los gastos investigados.
No serán los únicos que tendrán que responden a las cuestiones que plantee el juez. El titular del juzgado de instrucción número 2 también requiere de nuevo al perito de Hacienda que elaboró el informe sobre los pagos municipales al Niemeyer, como había solicitado el abogado de Varela el pasado 4 de abril. Y además, y pese a que nadie lo había solicitado, quiere oír a todos los proveedores que emitieron las facturas falseadas. Algunos de estos proveedores manifestaron hace ya meses a este periódico su inquietud ante el temor a que la investigación judicial les acabase salpicando.
Los representantes de los cargos municipales imputados (Varela; el exdirector general del Ayuntamiento, José Manuel del Arco, y la anterior jefa de gabinete de Alcaldía, M. E. G. L.) habían pedido el sobreseimiento, cuestión que avaló la Fiscalía y a la que sólo se opuso el abogado de Foro. En este sentido, el juez concluye que "en el momento procesal en que nos encontramos resulta prematura tal pretensión" puesto que "no se han practicado todas las diligencias de instrucción que se estiman necesarias" para determinar si tuvieron relación con los delitos que se investigan (malversación, prevaricación y falsedad documental). Así las cosas, explica en el auto notificado ayer, se pronunciará sobre las peticiones de sobreseimiento una vez practicadas las pruebas que ha solicitado.
La investigación por estos pagos municipales al Centro constituyen una pieza separada del conocido como "caso Niemeyer", abierto este último a petición de la actual consejera de Cultura, Ana González.
A raíz de este procedimiento, el Ayuntamiento detectó decenas de facturas que había abonado para gastos del Niemeyer y que tenían visos de haber sido manipuladas. Fue la propia alcaldesa de Avilés, Pilar Varela, quien remitió a la Fiscalía todas esas facturas (un total de 51) en el primer trimestre de 2013.
