El plan de ahorro eléctrico en el concejo ya está dando sus frutos en las facturas de luz, con la previsión de ahorrar en torno a 100.000 euros. "En 2013, invertimos 328.000 euros en alumbrado público durante todo el ejercicio y en 2014, el gasto a 20 de agosto, que es el octavo mes del año, es de 175.000 euros, estas cifras suponen un ahorro considerable y que se ampliará en los próximos meses", destacó el concejal de Obras y Medio Rural, José María Granda, que señaló además que este plan de ahorro comenzó a aplicarse en octubre, sin embargo, fue en los pasados meses de abril y mayo cuando el plan se amplió hasta casi todo el municipio.

Este sistema de ahorro energético se centra en el apagado de farolas en las zonas rurales donde tan sólo hay praderías y bosques a partir de la medianoche, aunque también en las zonas pobladas permanecerán encendidas farolas alternas. Además del apagado, el Ayuntamiento ha decidido adquirir lámparas de menor consumo, lo que reduce más aún el coste del alumbrado.

"Además si encendemos las bombillas menos horas, esas lámparas que tenían una vida de unos cuatro años, tendrán mucha más", señaló el concejal de Obras y Medio Rural, señalando así un nuevo ahorro añadido a los interiores. Y eso gracias a un plan cuyo coste es muy moderado. "Estamos invirtiendo entre 6.000 y 7.000 euros, lo que supone calderilla para el dinero que estamos ahorrando, sólo bastaba con establecer un plan para que el concejo esté iluminado en condiciones y sin derroches", señaló José María Granda. Este plan está siendo ejecutado por los trabajadores municipales, de ahí que el ahorro sea aún mayor.

El concejo cuenta actualmente con 4.761 puntos de luz entre la zona urbana y la rural. Por el momento, el Ayuntamiento ya ha acondicionado la red eléctrica en 400 farolas de Luanco y en 618 de la zona rural. La intención del gobierno es proseguir con este sistema y abarcar el mayor número de farolas posibles para reducir aún más la factura eléctrica municipal.

"El objetivo es cambiar el sistema eléctrico para reducir el consumo de las lámparas además del apagado en las zonas rurales a partir de medianoche", manifestó el concejal gozoniego, que añadió: "El Ayuntamiento tiene que velar por no derrochar dinero y más aún teniendo en cuenta los tiempos que corren. Si nadie en casa quiere dejarse las luces encendidas, nosotros tampoco".