El grupo Roca de la Guardia Civil con base en el acuartelamiento de Bustiello lucha contra los robos de explotaciones agrícolas y ganaderas en 36 municipios asturianos, desde Soto del Barco hasta Llanes. Un cabo primero y cuatro guardias civiles conforman la plantilla de este grupo, que comenzó a funcionar en diciembre de 2013. Ellos son los guardianes del campo, y a ellos corresponde la resolución de casos como la "Operación Bombilla", que se saldó con cinco detenidos y dos imputados por siete robos con fuerza y un hurto en fincas y casetas de aperos de Corvera y Gozón cometidos en los últimos meses.
Los integrantes del Grupo Roca se conocen al dedillo las empresas de reciclaje de residuos metálicos de los 11 partidos judiciales que cubren. A las chatarrerías llega la mayor parte del material que los cacos hurtan de las explotaciones agrícolas y ganaderas. Hace unos días localizaron en una empresa de este tipo de la zona de la ría de Avilés dos bañeras, bebederos de ganado, supuestamente robadas. Ante las sospechas, los agentes solicitan a los responsables de la empresa la factura de compra para identificar a quienes llevaron el material a la empresa.
"Inspeccionamos la entrada y la salida del material. Tenemos material incautado porque posiblemente ha sido robado. Estos bebederos es probable que sean de la zona de Villa y de Molleda", explica el jefe del equipo, el cabo Miguel González.
Los agentes repasan a diario las denuncias por temas de su competencia y visitan también a las víctimas de los cacos. Visten de paisano. Y es que su labor, más que preventiva, es investigadora. Para ellos la colaboración ciudadana es fundamental: "Mantenemos entrevistas con los ganaderos que han denunciado sustracciones y les damos recomendaciones, por ejemplo que intenten anotar la matrícula de posibles coches sospechosos. Su información es fundamental para nuestras investigaciones", explican los agentes. El grupo Roca no solo busca y atrapa a los ladrones del campo asturiano, también resuelve casos fruto de la picaresca. "Existe mucha picardía entre lagareros y vendedores. Nos encontramos con un caso en el que no daban de alta toda la manzana. Y detrás de los casos de robo de ganado, casi siempre te encuentras con otros delitos, como falsificaciones. Por ejemplo, en noviembre y diciembre es cuando se concentran más denuncias por desaparición, robo o extravío de ganado. Es la época de las matanzas. Cuando tienes un animal registrado, el motivo para darlo de baja tiene que ser por muerte, venta o sacrificio. Tenemos muchas denuncias falsas de gente que mata al animal en casa y después denuncia que se lo han robado", explican. Al que le han robado, y mucho, es a José Manuel Alonso Ania, "Lito", de Llanera: desde ganado a herramientas, pasando por baterías del tractor y cable, hasta pacas de hierba. "Lito" recibe a menudo la visita del equipo, que le asesora y le aconseja como prevenir nuevos robos: "Toy muy contento con esta gente. Están trabajando mucho y bien, pero los cacos también son listos. Esos trabajan poco, pero bien también", explica Lito, que tiene en estos agentes de la Guardia Civil a los ángeles de la guarda de su ganadería.
