Un grupo de trabajadores de Los Telares protestó ayer frente las puertas del palacio de Justicia de Avilés para reivindicar sus derechos laborales. Susana Solar, una de las afectadas, tenía señalado un juicio contra la empresa, pero nadie de la nueva dirección se presentó a la cita con el juez. La incomparencia de los dueños de la compañía que fundó el industrial asturiano de origen astorgano Julián Rus ante el juez se está haciendo costumbre; de hecho, la de ayer, fue la segunda vez en que los responsables de Los Telares eluden su cita con la justicia, aseguraron los trabajadores. "Pedimos ayuda a las instituciones, a las autoridades, a los jueces, a cualquiera que nos pueda echar una mano", afirmó Solar, que reclama que se embarguen las cuentas de todas las tiendas de la compañía. "No podemos vivir otro mes más sin sueldo", aseguraron los compañeros de Solar. Los empleados calculan que la empresa acumula deudas de entre 8.000 y 10.000 euros por empleado, tras haberse confirmado que los trabajadores tampoco han cobrado el sueldo ni la paga correspondiente al mes de junio.
La reclamación que más se escuchó ayer frente a los Juzgados es el derecho de los empleados a poder trabajar: "Ahora mismo no somos ni asalariados ni estamos en la cola del paro; no somos nada", se lamentó José Ramón Casal, otro de los participantes en la protesta. Los empleados también apelan a la ayuda ciudadana para que su protesta consiga visibilidad y meta más presión a los dirigentes de la empresa. "Hoy somos nosotros, pero esto mismo le puede pasar a cualquiera", recordó Solar. Y, mientras tanto, los nuevos gestores siguen sin dar una fecha para discutir el ERE que anunció al comité de empresa, que ya ha nombrado a sus negociadores.
