Una juez avilesina, mediante una sentencia dictada esta pasada primavera, retiró la pensión de divorcio de una mujer de 60 años porque "optó por no buscar trabajo". La consecuencia más inmediata de su sentencia, dice la perjudicada, es que ha dejado de tener ingresos. "Mañana [por hoy] tengo una cita con Cáritas. Me van a dar alimentos", aseguró. Por esta razón reclamará a partir de mañana viernes en la puerta de los juzgados avilesinos de la calle de Marcos del Torniello que se le devuelva la pensión de divorcio -alrededor de 450 euros mensuales. "Lo que busco es justicia. Apelamos la sentencia porque considerábamos que era injusta y antes de que saliera la fecha de la apelación (sigue pendiente), la juez ordenó que la empresa en la que trabaja mi exmarido dejara de hacerle la retención correspondiente", se lamentó la mujer.
En marzo pasado se celebró un juicio promovido por el exmarido que buscaba la modificación de las medidas dictadas en la sentencia de divorcio. Los dos se habían casado en 1979, se separaron en 2003 y se divorciaron en 2007. Las condiciones de la pensión compensatoria dictadas en 2003 se confirmaron en 2007. "El año pasado mi exmarido reclamó que se cambiasen las condiciones de la sentencia. Y eso sucedió ahora", aseguró la mujer. El exmarido alegaba que las condiciones económicas de su exmujer habían mejorado. La juez aseguró: "No consta que esto sea tal". También alegó que los gastos se habían incrementado. La juez aseguró que eso "no consta acreditado" suficientemente.
La alegación que sí fue atendida fue la del "absoluto desinterés de la demandada por paliar el desequilibrio económico que justificó en su día la fijación de la pensión compensatoria". Añadió además que la mujer, "en lugar de haber optado por ir poco a poco adquiriendo una formación que le permitiera en algún momento incorporarse al mercado laboral, optó por no hacerlo y, además incluso, optó por no buscar trabajo". "Estaba apuntada en el INEM. No pude seguir sellando la cartilla porque me vi obligada a trasladarme a Galicia entre 2011 y 2014 ya que vivía en el piso de mi hijo que tuvo que alquilar al quedarse en el paro. Luego el inquilino que tuvo lo destrozó y no pude regresar antes", reconoció la mujer. "El caso es que antes de que se vea la apelación, la juez ordenó que me quitaran la pensión. No pude reclamar porque mi abogado no quiso".
