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La botica "on-line" no cala en Avilés

Ninguna farmacia avilesina se ha sumado, de momento, al sistema de venta por internet de fármacos sin receta

Exterior de una farmacia en el centro de Avilés. IRMA COLLÍN

Las farmacias avilesinas no venden medicamentos por internet, al menos de momento. Ningún despacho farmacéutico de la comarca se ha sumado al sistema europeo puesto en marcha hace unas semanas y que permite a los ciudadanos adquirir en la red fármacos no sujetos a receta médica. La compra se realiza directamente a las farmacias abiertas al público, legalmente autorizadas, a través de su página web y utilizando un logotipo que garantiza la calidad, seguridad y eficacia del proceso.

"Al tratarse de un programa nuevo imagino que las farmacias prefieren esperar un tiempo por prudencia hasta comprobar cómo evoluciona", señala la farmacéutica avilesina Mireya Suárez Hurlé, que considera esta modalidad de compra de fármacos "un paso natural en la evolución del mercado. Primero se permitió la venta por internet de los productos de parafarmacia y ahora le llega el turno a los medicamentos sin receta".

No obstante, Suárez Hurlé, vocal de la junta de gobierno del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Asturias, no ve de momento las ventajas de la compra a distancia. "Cuando una persona necesita un producto para combatir un resfriado o un dolor de cabeza resulta más fácil y rápido acudir a una farmacia ya que existe una amplia red. Siempre encontrará a mano una abierta, tanto de día como de noche. Además, en ella cuenta con el asesoramiento de un profesional, un valor añadido a la venta directa", indica. Aún así, cree que hay que dejar correr el tiempo para saber el rumbo que tomará esta iniciativa europea que en España desarrolla la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios en colaboración con las comunidades autónomas.

Para la puesta en marcha de este proyecto se ha creado una aplicación informática de nombre Distafarma en la que los ciudadanos pueden consultar el listado de farmacias ubicadas en su comunidad que pueden realizar la venta. Gracias a este modelo, quienes lleven a cabo compras podrán asegurarse de que lo hacen en una farmacia legalmente autorizada y que los medicamentos que adquieren reúnen las garantías necesarias.

La venta de medicamentos falsos e ilegales está proliferando por internet y supone un motivo de preocupación para las autoridades sanitarias y los profesionales de la salud. Como ejemplo, una cifra: en el mes de junio de 2013 se decomisaron 10,1 millones de comprimidos ilícitos y de imitación en 99 países. Para atraer clientes, los fabricantes y distribuidores juegan con el precio, mucho más bajo que en la farmacia autorizada. "Es un timo. Pero esto no es lo más relevante; lo verdaderamente importante es que estos medicamentos pueden ser una amenaza para la salud", resalta Mireya Suárez Hurlé, ya que no contienen -o contienen dosis erróneas- el principio activo necesario para que el medicamento haga efecto y las sustancias utilizadas para adulterar el producto pueden ser nocivas y hasta mortales.

"Tenemos que crear conciencia en la ciudadanía; no se puede jugar con la salud. A la hora de comprar estos fármacos hay que tener en cuenta la seguridad", destaca la farmacéutica avilesina, para aconsejar a los ciudadanos desconfiar de un producto cuyo precio en internet difiera mucho del que se encuentra en la farmacia. "Como se decía antes, nadie da un duro a cuatro pesetas", destaca.

Los medicamentos falsificados y que se adquieren por internet pueden burlar hasta a los propios médicos. La única forma de evitar los riesgos que entraña su consumo es comprarlos en establecimientos regulados y éstos llevan un logotipo. Por ello, para no correr riesgos, a la hora de comprar a través de una web, el primer paso es buscar dicho logo. Al pulsar sobre él aparecen las farmacias que venden medicamentos registrados ante el organismo competente. Toda farmacia que venda a distancia fármacos en la red debe incluir este distintivo, concluye Suárez Hurlé.

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