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Crisis en los ambulatorios

La falta de personal durante el verano colapsa los centros de salud comarcales

Los profesionales del sector denuncian que la Consejería de Sanidad no cubre adecuadamente las vacantes en los periodos vacacionales

Los profesionales del Servicio de Salud del Principado de Asturias (Sespa) denuncian colapsos en ciertos ambulatorios comarcales durante el verano debido a la falta de personal. Según fuentes consultadas por LA NUEVA ESPAÑA, los trabajadores del ambulatorio de Piedras Blancas (Castrillón) tuvieron que realizar sus funciones el pasado lunes con cuatro de los ocho médicos que tiene en plantilla, ya que la mitad de los trabajadores se encuentra disfrutando de sus vacaciones. Ante esta situación, los doctores de la capital castrillonense tuvieron que pedir a los pacientes que limitasen las consultas a las urgencias.

"Castrillón es un concejo con una importante sobrecarga durante los meses de verano, y trabajar a un rendimiento del 200 por ciento genera ansiedad y agotamiento entre el personal sanitario", aseguró la misma fuente, que también afirma que la plantilla de Piedras Blancas ha pedido en reiteradas ocasiones "más personal durante el período estival", si bien desde el Sespa han declinado la petición argumentando que "no hay sustitutos".

El ambulatorio de Luanco, uno de los concejos comarcales que más visitantes recibe durante los meses de verano, cuenta con cinco médicos en plantilla. Actualmente dos de ellos están de vacaciones, y un tercero iniciará sus días de asueto en la segunda quincena de agosto. "Ningún médico ha cogido vacaciones durante el mes de julio, por lo que lo hemos sobrellevado bastante bien, pero por los pocos días que llevamos de agosto ya intuimos que lo que nos espera no será tan fácil", comentó un profesional del centro de salud de Luanco.

A diferencia de en Piedras Blancas, en la capital gozoniega el Sespa sí cubre alguna de las bajas por vacaciones, además de contratar a un médico de incidencias; un doctor que trabaja por las tardes reforzando el servicio de emergencias desde mediados de julio hasta el 1 de septiembre. "Nos vamos a quedar con dos médicos titulares y un sustituto para las mañanas; y entre todos nos tenemos que repartir el trabajo de cinco personas. A esto hay que sumarle que el número de desplazados -veraneantes- que recibe Gozón es altísimo y el de servicios también", explicó otro profesional del sector. Y es que la gran cantidad de visitantes que recibe el concejo no sólo influye en el número de urgencias registradas, sino que también hace aumentar el número de consultas en domicilios, lo que "desborda" al personal sanitario. "Solicitamos que, al menos, prorrogasen la estancia del médico de incidencias todo el mes de septiembre, pero parece que eso será imposible", añadió.

Una realidad un tanto distinta se vive en el centro de salud rural de Cudillero. Este ambulatorio cuenta en su plantilla con dos enfermeros y dos médicos, por lo que las vacantes por vacaciones siempre son cubiertas. "Con todos los desplazados que tenemos no pueden permitirse el lujo de no cubrir las bajas", informó una fuente cercana al centro. Precisamente, los profesionales de Cudillero notan "un gran incremento" en el número de servicios, si bien afirman que entre los cuatro empleados "van tirando".

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