El Museo Marítimo de Asturias recibió el pasado año un menor número de visitantes con respecto a 2013. Y esto se tradujo también en los ingresos por entradas, que en 2014 fueron 20.055 euros, frente a los 30.116 recaudados en el año anterior. Tras realizar el pertinente análisis económico de esos datos, el centro consiguió un balance positivo de 3.000 euros frente a los 8.000 alcanzados el año anterior, según los datos aportados por el Alcalde, Jorge Suárez.
Hace varios meses, en marzo del año en curso, la Fundación del Museo Marítimo de Asturias se percató de esta bajada en el número de visitantes y decidió atajar el problema. Los patronos apostaron por rebajar el precio de las tarifas, cuestión que ,a ojos de la dirección del centro, ya ha comenzado a dar sus frutos apenas seis meses después de aplicar esta rebaja.
De hecho el director, José Ramón García, puso recientemente sobre la mesa una comparativa de visitantes de los tres últimos años, tomando julio como referencia, para mostrar que esa bajada en las tarifas atraía a más público al centro. Según esos datos, en junio de 2015 el Museo Marítimo recibió a 2.184 personas, frente a las 973 registradas el pasado año y las 1.670 del mismo mes en 2013.
A falta de concluir el recuento del número de visitantes del pasado mes de julio, el centro registró al menos más de 2.000 usuarios frente a los 1.781 que tuvo durante el mismo mes de 2014 y los 1.890 que registró el año anterior. José Ramón García afirmó que en el incremento en el número de visitantes de este año influye tanto la rebaja de tarifas como la calidad de las exposiciones temporales que se pueden ver en la actualidad en el Museo Marítimo de Luanco.
Así, la muestra sobre el Descubrimiento de América y la figura de Cristóbal Colón ha conseguido atraer a decenas de turistas y, sobre todo, a excursiones de centros escolares hasta el pasado mes de junio. La otra exposición que se puede ver actualmente en el centro luanquín -al margen de la muestra permanente- es la que repasa la vida del marino guipuzcoano Blas de Lezo.
