"La tramitación del polígono de Castrogonzalo se alargó por diferentes motivos". Esta es la justificación que ofreció ayer el ingeniero Luis Suárez -uno de los tres intermediarios del proyecto de fundición para Corvera- sobre otro de los trabajos en los que él, junto a su socio José Luis Colao, y al empresario José Caamaño, realiza las negociaciones previas. En este caso aseguran actuar en nombre de una inversora rusa, Siberian Foreign Invesment. Y así, según explicó Suárez, con las últimas elecciones municipales, el PSOE sustituyó al PP en el gobierno municipal, y el nuevo Alcalde se decanta por una tramitación diferente: primero aprobar las normas urbanísticas y después el plan parcial, en lugar de resolver ambas cuestiones a la vez. "En cualquier caso, sigue para adelante; le entregué al Alcalde toda la documentación, y él la tiene que estudiar". Este periódico intentó recabar la opinión del Alcalde, que se escudó en el poco tiempo que lleva en el Ayuntamiento y en el poco conocimiento que tiene sobre el proyecto para no opinar.