Se subió al tejado de una nave para revisar el estado de la techumbre antes de realizar labores de limpieza, y desde allí se precipitó al vacío. Un trabajador de 61 años, de una empresa de impermeabilizaciones de Gijón, se debate entre la vida y la muerte tras sufrir este desgraciado accidente en una nave del Parque Empresarial Principado de Asturias (Pepa), en la avenida del Zinc. Según fuentes de la empresa donde se produjo la caída, Auto Repuestos Amado, los trabajadores subcontratados acababan de llegar, no habían comenzado a trabajar todavía, y uno de ellos se subió a inspeccionar el tejado. El servicio para el que había sido contratada la empresa gijonesa era revisar y acondicionar los canalones de la nave. Minutos después se produjo la caída desde una altura aproximada de 7 metros (en un primer momento las informaciones apuntaban, por error, a 15 metros).

Al lugar de los hechos se trasladaron la ambulancia de soporte vital básico y la UVI móvil de Avilés, tras recibir el centro de coordinación la llamada de aviso a las 9:49 de la mañana. Según los datos que facilitó el Servicio de Atención Médica Urgente (Samu), el afectado presentaba un politrauma grave. Fue trasladado al Hospital San Agustín, donde se le efectuó una primera operación de urgencia, de la que el paciente salió pero en estado crítico. A partir de ese momento los médicos determinaron 72 horas de margen para saber si el trabajador podrá seguir teniendo esperanzas de vida.

"Lo primordial es que se ponga bien", deseó una portavoz de Auto Repuestos Amado, que no conocía al accidentado de anteriores servicios, y que lamentó lo ocurrido sin alcanzar a comprender las causas de la caída. "No les había dado tiempo a empezar a trabajar".

Según los datos de siniestralidad laboral del Instituto Asturiano de Prevención de Riesgos Laborales, en el primer semestre del año se produjeron en la región un total de cuatro accidentes mortales, todos ellos de varones: dos del sector industrial y otros dos del sector servicios. Incluyendo también los accidentes graves, el número aumenta hasta los 35, a razón de 33 hombres y dos mujeres. Sin embargo, a lo largo del verano se produjeron otros cuatro accidentes mortales, lo que deja la cifra en ocho en lo que va de año. Y eso sin contar que alguno de los accidentes que fueron graves en un primer momento acabaran finalmente siendo mortales.

La responsable de Salud Laboral de la Unión General de Trabajadores (UGT), Nerea Monroe, subrayó la preocupación tanto por el accidente de ayer como por el índice de accidentes laborales en Asturias, "que es muy alto" y que afecta especialmente a los sectores de la construcción y afines. "No entendemos que, a menos actividad, haya más accidentes. Y además el problema está con los de carácter grave y los mortales, que están en aumento", incidió Monroe.

Por último reclamó a la administración "que tome las medidas oportunas e investigue el accidente", y a los empresarios "que no dejen de lado las medidas de seguridad", ya que pese a las dificultades económicas, no es un apartado del que las empresas puedan recortar.

También en relación a los siniestros laborales, los sindicatos vienen denunciando desde hace tiempo que el empleo precario perjudica la prevención, lo que se traduce en el aumento de la siniestralidad derivada de la desprotección e inseguridad en el trabajo. La UGT y CC OO se manifestaron recientemente en Oviedo, después de que falleciera un trabajador, para poner el acento sobre este problema.