Primero fue La Maruca, luego El Quirinal y ahora, Llaranes. El Colectivo Ecologista de Avilés denunció ayer que el pasado domingo "se disparó" la polución por partículas en la estación de control de la contaminación de Llaranes, donde se alcanzaron "picos" de más de 200 microgramos por metro cúbico de PM10. "Estamos hablando de valores fuera de toda lógica en una estación ubicada en una zona urbana. Son diez veces los considerados por los científicos como razonables", manifestó el portavoz de dicho colectivo, Fructuoso Pontigo. Agregó: "Esta contaminación la están padeciendo los vecinos con el silencio y complicidad de las administraciones, que no sabemos que hayan tomando medidas para paliar estos valores a pesar del Plan de Mejora de Calidad del Aire".

Los ecologistas denunciaron que en solo cuatro días se registraron cinco veces niveles superiores en cuatro de las estaciones de control del aire instaladas en Avilés. "Esto demuestra que hay un grave problema de contaminación que se oculta y que hay un mal mantenimiento de las estaciones de control, lo que implica que si se limpian poco pasan menos partículas y se reduce la contaminación que se mide", dijo Pontigo.

La contaminación en partículas PM10, recalcó, está asociada a la aparición y el agravamiento de múltiples patologías. "Las partículas pueden entrar en el sistema respiratorio, llegando y adosándose en los alvéolos, impidiendo un intercambio adecuado de oxígeno entre los pulmones y la sangre. La exposición crónica a las partículas aumenta el riesgo de enfermedades cardiovasculares y respiratorias, así como de cáncer de pulmón", concluyó el portavoz del Colectivo Ecologistas de Avilés que exigió a las administraciones competentes que tomen cartas para frenar los elevados índices de polución que sufre Avilés.