Tres son los emplazamientos que analiza el gobierno de Avilés, que no descarta ampliar la terna en los próximos días, para construir y poner en servicio a primeros del año que viene un aparcamiento de camiones que solucione el problema originado por el exilio al que se han visto empujados los transportistas usuarios del estacionamiento habilitado en 1984 en la avenida de Gijón (a la entrada de Avilés desde la autopista Y) y que desde hace unos días es objeto de obras para su reconversión a aparcamiento de vehículos ligeros.

Fuentes del gobierno municipal indicaron que las tres parcelas susceptibles de convertir en aparcamiento para camiones y vehículos pesados cumplen con los requisitos de estar situados fuera del casco urbano, relativamente cerca de las principales arterias de comunicación de la comarca y en áreas donde la presencia de los camiones tendría un impacto visual limitado. La intención municipal -al menos así se ha transmitido a los transportistas usuarios del aparcamiento de la avenida de Gijón- es calificar urbanísticamente el suelo elegido para el futuro estacionamiento de camiones para que pueda tener ese uso, ejecutar obras de acondicionamiento y ponerlo en servicio con capacidad para un centenar de vehículos; y todo eso en un plazo de entre tres y cinco meses.

Y ese corto tiempo, precisamente, es el que genera incredulidad entre los transportistas, algunos de los cuales hacen ver que resulta difícil de creer que el Ayuntamiento vaya a ser tan ágil cuando en los últimos 21 años fue incapaz de proporcionar una solución a la reiterada demanda de los camioneros de la ciudad de contar con un aparcamiento "en condiciones". De hecho, varias fueron las propuestas que se pusieron sobre la mesa y todas ellas quedaron en agua de borrajas, la última el aprovechamiento de una parcela calificada para suelo industrial en la zona de Retumés.

Entre tanto se sustancia el prometido aparcamiento, la solución que brinda el gobierno avilesino a los camioneros a desalojar de la avenida de Gijón (dueños de unos 70 vehículos) es provisional, precaria y polémica. Ayer mismo, los transportistas tuvieron una reunión en el solar municipal de Divina Pastora donde el Ayuntamiento propone reubicarlos. Los profesionales del transporte plantearon algunas dudas y muchas reticencias, exigieron una mejora en las zonas no alquitranadas del recinto e insistieron en que sólo aceptarán el traslado si tienen garantías de que habrá un servicio eficaz de vigilancia.