Los dueños de perros protestaron ayer por las nuevas señales colocadas en el parque Zapardel que prohíben, en principio, el paso de canes al interior de este espacio municipal. Ante esta queja, el Ayuntamiento explicó que la prohibición tan solo se centra a los espacios verdes del entorno de la Casa de Cultura de Luanco. "No se está impidiendo el paso a los perros, simplemente se prohíbe que defequen en los jardines dada la proximidad con el parque infantil y teniendo en cuenta que, en ocasiones, esos espacios son utilizados por los niños", señaló la portavoz del PSOE y concejala de Hacienda, Arantza Peláez, que ha promovido recientemente una modificación en la ordenanza de animales.
La concejala socialista indicó además que las señales que se han colocado en el parque a las que hacen referencia los dueños de mascotas "son las mismas que antes estaban ubicadas en las zonas ajardinadas" en las que se indicaba la misma prohibición. "Si se quitaron de los jardines fue tras una petición de los grupos de madres que acuden con sus hijos al parque Zapardel, ya que estaban a la misma altura que los niños", apuntó Peláez, que destacó además que el único encaje que tendría habilitar ese parque para mascotas sería en un terreno cerrado perimetralmente, que por el momento no entra entre los planes de los socialistas gozoniegos.
Eso sí, el equipo de gobierno tiene intención de habilitar espacios para el esparcimiento de los perros dentro de la nueva normativa. Los propietarios de perros ven positiva esta medida y demandan espacios para sus mascotas. La ordenanza municipal permitirá además regular una serie de sanciones administrativas para las personas que no atiendan convenientemente a sus animales y también para las propietarios de perros que no recojan las deposiciones. En este caso, la nueva normativa obligará a los dueños de animales domésticos a portar bolsas de plástico con ese fin.
