La sociedad mixta para la gestión del suelo de Corvera, Sogetesa, ha sido disuelta esta semana tras trece años de vida. Este organismo nació en 2002 para desarrollar la urbanización de la cuesta de Los Campos, un área que capitalizó el "boom" inmobiliario en el concejo junto con la urbanización de Los Balagares, en Truyés. Tras haber finalizado su labor entre las dos principales poblaciones del concejo, Las Vegas y Los Campos, el siguiente cometido de la sociedad fue la tramitación del polígono de Silvota-Rovés, aún pendiente de desarrollar. Una vez finalizadas estas gestiones, el Ayuntamiento decidió en 2013 iniciar los trámites para liquidar Sogetesa. Uno de los principales argumentos para tomar esta decisión es económico. Según el gobierno, el cierre costará unos 140.000 euros mientras que su mantenimiento saldría más caro, unos 160.000 anuales.
Esta sociedad está participada en un 51 por ciento por el Ayuntamiento; el porcentaje restante se encuentra en manos de varios promotores privados que ayudaron a desarrollar la urbanización de la cuesta de Los Campos. La propuesta de constituir Sogetesa nació en tiempos del alcalde Severino Zapico, ya fallecido. Desde el principio, la entidad recibió críticas de la oposición porque suponía una "privatización" de la gestión urbanística, según expresaron desde las filas de IU. Pese a que Sogetesa nació de una idea del PSOE, fue en el siguiente mandato cuando la firma tuvo más actividad. En 2003, el exsocialista Luis Belarmino Moro volvió a la alcaldía al frente de la USPC y el entonces nuevo partido independiente pactó con el PP.
Durante ese mandato comenzó a tramitarse la urbanización de la cuesta de Los Campos. Dos años más tarde de haber sellado el pacto de gobierno entre la USPC y el PP, un Pleno celebrado el 4 de enero de 2005 y una resolución de alcaldía del mismo año dieron luz verde a la aprobación del plan parcial sin disponer de competencias para ello. En esos informes se eliminó la densidad de viviendas fijada en el plan y además se infringió el procedimiento de transmisión y alteración a la hora de calificar 7.994 metros cuadrados de suelo público que pasaron a privado "sin ser debidamente justificado".
Inestabilidad política
Las elecciones municipales de 2007 dan de nuevo una victoria en las urnas a la USPC. Sin embargo, en una sesión de investidura sin precedentes, el PP decidió apoyar como alcalde a José Luis Vega (PSOE), que pasaría a gobernar en coalición con IU. El nuevo gobierno del PSOE e IU se marcó un objetivo: intentar buscar una solución a los problemas de la urbanización de la cuesta de Los Campos, para lo que se planteó incluso hasta su demolición tras analizar varias sentencias judiciales al respecto.
Fue entonces cuando el Ayuntamiento comenzó a negociar con la promotora que levantó los edificios hasta sellar un acuerdo el 3 de agosto de 2007. Con ese convenio encima de la mesa, el Ayuntamiento catalogó finalmente la zona como suelo apto urbanizable, por lo que pudieron cumplirse las fechas previstas de entrega de los inmuebles a los compradores. De esta manera, finalizaron los procesos en los que participaron tanto el gobierno de la USPC y el PP como la constructora, al dar por aprobado un informe enviado a la CUOTA, ante la ausencia de respuesta de este organismo autonómico.
El acuerdo sellado por el alcalde José Luis Vega permitió además la recuperación de un millón de euros que pasaron a las arcas municipales. Ese dinero llegó como compensación por el cambio de uso de los espacios libres de uso peatonal a espacios libres de uso privado. Posteriormente, en agosto de 2008 cambió de nuevo el gobierno tras una moción de censura presentada por la USPC y el PP.
Siete millones de ingresos
La construcción de viviendas en la cuesta de Los Campos durante los últimos diez años supuso el ingreso en las arcas municipales de más de siete millones de euros por la construcción de la nueva escuela infantil, el parque Europa de Las Vegas, la prolongación de la calle Rubén Darío y la construcción del Llar, entre otras obras que se financiaron con las compensaciones recibidas por el desarrollo urbanístico.
Tras solucionarse el entuerto urbanístico de la cuesta de Los Campos, la sociedad mixta para la gestión del suelo de Corvera ralentizó su actividad hasta que se le encomendó tramitar el desarrollo del polígono industrial de Silvota-Rovés. Este área ubicada en la parroquia de Trasona se gestiona mediante el régimen de cooperación; es decir, los propietarios del suelo pueden optar por gestionar directamente sus terrenos haciéndose cargo de la urbanización. Los dueños de los solares afectados pueden optar por beneficiarse con el desarrollo del área industrial o bien vender sus terrenos y cobrar el dinero previamente.
Según el equipo de gobierno de Corvera, Sogetesa cumplió con su labor, que era "situar al polígono de Rovés en primera línea de salida para que cuando la coyuntura sea más favorable se desarrolle de manera inmediata". El Alcalde, Iván Fernández, subraya que el hecho de que la sociedad sólo diera beneficio en dos de sus catorce años de vida le hace entrar por ley en causa de disolución, a no ser que se realizara una ampliación de capital, algo que el PSOE descarta: "No serviría de nada ya que la sociedad no tiene ninguna función que hacer".
