Las obras de mejora de la travesía de la Industria causan satisfacción, en general, a los usuarios del vial, conocido por muchos como el "bulevar de los baches". Los trabajos de acondicionamiento comenzaron el pasado l5 de septiembre y, aunque con las molestias habituales de este tipo de obras, las personas que utilizan a menudo esta carretera están contentas: "Ya era hora, no voy a decir más. Después de años saltando por ahí con los coches, ya tocaba", afirma Daniel Águila, trabajador de Ferralla Las Arobias.

Por esta vía pasan unos 9.000 vehículos diariamente y un diez por ciento de ellos son camiones. "Paso por esa carretera demasiadas veces para cómo estaba. Las obras tenemos que asimilarlas, si queremos que la situación mejore, tenemos que soportarlo. Lo que era imposible era circular tal y como estaba", explica Ismael Álvarez, camionero de la empresa Asturcoop. "De todas formas, ese vial tiene suficiente anchura para poder circular en dos carriles si quitan parte de los aparcamientos", sostiene.

Sin embargo, hay a ciertos negocios a los que las obras, cuyo fin está previsto para diciembre, pueden ser un duro golpe, como, por ejemplo, las cafeterías de la zona. "Los camiones no pueden aparcar y nos está afectando fuertemente, no hay nadie. ¿De qué vivimos hasta entonces?", sostiene la gerente de una de las cafeterías de la travesía.

Aunque son los trabajadores del polígono industrial y los camioneros los más afectados por la situación en la que estaba la carretera, los vecinos de la zona de Jardín de Cantos, también utilizan a menudo el vial y celebran el arreglo. "Me siento muy satisfecho porque era muy necesario. Había unos baches abismales y con un turismo podías quedarte en ellos en cualquier momento", señala Antonio Cabrera, presidente de la asociación de vecinos de Jardín de Cantos.