El Grupo Local de Inmigración de Avilés (GLIA), constituido en 2006 a iniciativa de los Servicios Sociales del Ayuntamiento, ofreció ayer un taller de sensibilización sobre la convivencia y la diversidad a las asociaciones y vecinos de Llaranes. "Esta actividad busca que sean los ciudadanos los que nos trasladen sus propuestas y las soluciones para una mejor convivencia de una forma positiva; no sólo con inmigrantes, sino con personas de culturas diferentes", sostiene Rocío Yebra, responsable del programa "Municipios sin racismo, pueblos por la inclusión", que puso en marcha el grupo.

Ayer fue el turno de Llaranes, pero este taller ya se ha realizado en otras zonas, como La Luz o Las Meanas. "La experiencia está siendo muy positiva, es un tema que interesa mucho. De las propuestas más interesantes que nos hacen están las relacionadas con espacios comunes para conocerse. Conocer las diferentes culturas y costumbres y respetarlas es básico para convivir", explicó la responsable del programa. Tras el taller, la jornada se completó con una merienda con productos de comercio justo, una forma más de conocer la realidad de otras partes del planeta.

Llaranes es un barrio que integra vecinos muy diferentes que ha llevado en conflictos vecinales en ocasiones, pero no es esa la razón por la que el GLIA realiza la actividad allí: "No buscamos barrios con problemas, la convivencia es algo positivo. Nos hemos movido en sitios en los que hay interés de las asociaciones y de los vecinos", explicó Yebra.