El punto limpio de Los Canapés está sucio y abandonado. Lo dicen los vecinos, que recientemente presentaron una querella ante la Guardia Civil por las "condiciones pésimas" que ofrece el recinto. Y también los trabajadores, de la empresa Urbaser, que hace quince días formularon una denuncia a Inspección de Trabajo por el mismo motivo. Los afectados piden el cierre o la remodelación del ecoparque de titularidad municipal ubicado en la calle Ignacio Trabanco. Ante estas quejas, el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) está investigando dicho punto de recogida de basura reciclable con el fin de elaborar un informe que próximamente remitirá a los departamentos de Medio Ambiente del Gobierno regional y el Ayuntamiento.
"A principios de año alguien prendió fuego a la caseta que hacía las veces de oficina y vestuario de los trabajadores y todavía no se ha repuesto. El cierre del recinto está roto y la fosa de aceite tiene pérdidas, lo que consideramos poco saludable", manifestó ayer Laura Toledano Bueno, presidenta del comité de empresa de Urbaser. También destacó que los trabajadores de la instalación -cuatro personas en total- carecen de un sitio en el que resguardarse. Los afectados, según ha podido saber este diario, solicitan así el cierre de este parque o su remodelación íntegra.
"El deterioro del ecoparque es total y vergonzoso. Podíamos decir que la instalación es tercermundista, pero está todavía peor que si fuera de algún país subdesarrollado", manifestó un trabajador de Urbaser conocedor de la situación en la que ejercen sus colegas en el ecoparque de Los Canapés. "En esas condiciones no se puede tener a nadie. La fosa de echar el aceite, por ejemplo, está cerrada y con filtraciones", reiteró.
A todo esto hay que añadir falta de seguridad. Según los vecinos, un grupo de personas, la mayoría de etnia gitana, detiene a algunas usuarios a la puerta del recinto: "Llegan a intimidarlas para que les dejen las pertenencias que van a llevar al recinto como neveras, ordenadores o microondas". Los afectados lamentan que todo esto ocurra en un recinto próximo al Centro Europa, el parque de Bomberos de Avilés o el Centro de Emprendedoras de Asturias.
De todo esto está ahora levantando acta la Guardia Civil a través de los agentes destinados en el Seprona. Las conclusiones que extraigan de la investigación las remitirán en los próximos días al departamento de Medio Ambiente del Principado y al Gobierno local. En el punto limpio de Los Canapés se depositan residuos considerados no peligrosos (papel y cartón, envases y plásticos, vidrio y electrodomésticos) y peligrosos (neveras, frigoríficos, tubos fluorescentes, aceite de motor y filtros, aerosoles, pinturas, disolventes, baterías y pilas).
