Jesusín de Galiana acaba de recuperar todo el esplendor con el que nació en 1949 de las manos de Luis Marcos Pérez. La Cofradía de Nuestro Padre Jesús de Galiana presentó ayer de manera oficial la nueva imagen de la talla tras su restauración a cargo del escultor imaginero de Medina de Rioseco (Valladolid) Ángel Martín García, el mismo que devolvió su lustre a la Virgen de Nuestra Señora de los Dolores. Al acto, celebrado en la iglesia de San Nicolás de Bari, acudió un buen número de fieles, además de miembros de la hermandad y representantes de las cofradías avilesinas.

"La imagen llegó en muy malas condiciones, debido a varias restauraciones inadecuadas. Hubo que restablecer la policromía y rellenar pérdidas volumétricas. También había lagunas cromáticas. Se ha conseguido recuperar la claridad de cuando la realizó Luis Marcos Pérez", aseguró Martín García.

Para la cofradía el de ayer fue "un momento muy grande", tras meses de trabajo en el taller -la recuperación se alargó entre los meses de julio y noviembre-. "Los años, el tiempo y la humedad habían hecho mucha mella en la imagen. Y en la restauración no solo aparecieron cosas motivadas por el tiempo y que no se veían a simple vista. La mejora era necesaria porque corríamos el riesgo de que en una procesión de Semana Santa se nos cayera a cachos", reconoció Saturnino Paniagua, hermano mayor de Nuestro Padre Jesús de Galiana. La hermandad sufragó la restauración de la pieza con cargo al premio de la lotería de Navidad de hace dos años y con las donaciones de los cofrades, según explicó Paniagua.

La presentación del remozado Jesusín fue una fiesta para los fieles, en la que hubo una explicación por parte del imaginero además de un concierto a cargo de Patricia Martínez y una misa en la que se bendijo al cristo. La talla concluyó la intensa jornada durmiendo de nuevo en su casa, en la capilla de Galiana.