"Un proyecto para dotar al palacio de Maqua de estabilidad y estanqueidad". Esta es la reclamación que envió hace unos días Patrimonio al Ayuntamiento de Avilés, con el objetivo de preservar el céntrico palacio de la calle La Cámara, que está declarado Bien de Interés Cultural (BIC) y que permanece en desuso desde hace años a excepción de los bajos, que son de propiedad particular. El resto del edificio es municipal y, aunque se decretó su venta, la tasación de 1,4 millones de euros no ha convencido a los posibles compradores.

No es la primera vez que un requerimiento de este tipo obliga al Consistorio a acometer obras en el céntrico inmueble, pero las medidas tomadas no fueron lo suficientemente importantes, toda vez que se produce este nuevo requerimiento. El inmueble se rehabilitó en 1983, 1997 y, de forma más somera y reciente, en 2013. Las quejas sobre el estado de conservación del palacio han sido constantes en los últimos años, pero el Ayuntamiento descartó en su día acometer una rehabilitación a fondo porque supondría una inversión muy importante.