El papel desaparecerá de los Juzgados en apenas un mes. La práctica totalidad de los trámites judiciales se realizarán, a partir del 1 de enero, mediante medios telemáticos, una de las medidas del plan de modernización de la justicia impulsado por el Gobierno. Este cambio tiene en alerta a los funcionarios y a sus representantes sindicales, que temen que la premura del proceso y la falta de medios materiales y personales para llevarlo a cabo conlleven un atasco tanto en el Palacio de Justicia avilesino como en el resto de sedes asturianas. "Estamos muy preocupados. Con la propaganda de la modernización de la Justicia se está apurando para que todos los decanatos hagan de oficina de registro y reparto, cuando los medios tecnológicos no son los más adecuados. El 1 de enero está ahí y esto no acaba de arrancar", advierte Juanjo Azcano, de CC OO.
Para Cristina Esteban, de CSIF, "modernizar la justicia de golpe, como se pretende, es complicado". "El sistema es muy limitado. Queremos avanzar mucho, pero sin medios y con ideas un tanto peregrinas", añade. "Nos tememos lo peor. Lo que hace falta en la justicia, a la hora de pasar del papel a la digitalización es dotar de los medios materiales y necesarios. Es cierto que, en la última reunión que mantuvimos con el director general de Justicia, se nos manifestó que habrá refuerzo de personal, pero esa cantidad es escasamente insuficiente", asevera la responsable de Justicia de la UGT, Elena Casas.
En ese encuentro, se comunicó que se nombrarán nueve funcionarios de refuerzo del cuerpo de tramitación: los decanatos de Avilés, Oviedo y Gijón contarán con dos personas de refuerzo cada uno, mientras que en Langreo, Mieres y Siero sumarán uno por sede. En Laviana, Grado y Pola de Lena habrá prolongación de jornada para un funcionario de cualquier cuerpo. Tanto los refuerzos como las prolongaciones de jornada están previstos para un plazo de cuatro meses, prorrogable como mucho a seis. "Se necesitaría dotar del doble de personal. A modo de ejemplo, en Oviedo se registran unos 300 escritos a diario, dos personas de refuerzo es a todas luces insuficiente. Y qué decir en sitios como Mieres o Pola de Siero, donde los funcionarios que llevan el registro se encargan también de tramitar los expedientes del Juzgado. El funcionario que tenga ese día que registrar, no podrá dedicarse a otra cosa ni tramitar ninguno de los procedimientos de su mesa", advierte Casas.
Las notificaciones a abogados y procuradores se realizan ya hace tiempo por medios informáticos, mediante el programa Lexnet. A partir del 1 de enero, en los Juzgados sólo utilizarán papel los particulares, pero esos documentos también se digitalizarán. Y es que con este nuevo sistema (Lexnet II) todo accede al Juzgado escaneado por los profesionales. Según explican los representantes de los funcionarios de justicia, son muchos y variados los inconvenientes con los que se encuentran los trabajadores de los Juzgados. Es habitual que los documentos lleguen incompletos o con un número incorrecto, por lo que los funcionarios tienen que volver a escanear todo de nuevo. Un problema añadido es que "sólo se pueden escáner documentos que no pesen más de diez megas, peso que se alcanza con tan solo 40 folios" (hay procedimientos que suman miles de folios).
Pero además de lo que entra a diario en el Juzgado, también hay que digitalizar los procedimientos que están ya en curso mediante su escaneo y digitalización. "La Dirección General de Justicia ha comprado escáneres para que cientos y miles de folios sean escaneados en cada sede, para aún no han llegado", asevera Azcano. También está previsto que antes de la entrada en vigor del papel cero, se actualice el sistema informático, que presenta importantes carencias, según las mismas fuentes. "Si la tecnología va a funcionar como la que tenemos ahora, el atasco puede ser brutal", advierte Azcano. Y lo mismo opina su homóloga en la UGT. "Actualmente estamos en periodo de prueba, pero el 1 de enero entra definitivamente a funcionar. Todos nos tememos que va a ser un auténtico caos. De hecho, los profesionales siguen presentando en papel para asegurar, no se fían", asegura. El problema, sostiene, es que "el sistema operativo tiene que estar continuamente actualizado, existen incompatibilidades con otros certificados, los servidores actuales de los que dispone la Administración no tienen capacidad para absorber toda la demanda que van a tener que soportar a partir del 1 de enero".
Así las cosas, los representantes sindicales sostienen que, para dar el paso en los Juzgados del papel al expediente digital, se necesita dotarlos de medios materiales personal y suficientes. "Lo anunciado hasta el momento es insuficiente y generará un retraso notorio en la administración de la justicia asturiana", concluyen.
