El ciclo "Infancia saludable" que organiza el Centro de Servicios Universitarios encara la recta final. Ayer se celebró la penúltima de las charlas coloquio con la presencia de Isolina Riaño, jefa de pediatría del hospital San Agustín, y el dentista Javier Suárez, que hablaron sobre "Come sano y cuida tu boca". La próxima conferencia tendrá lugar el miércoles 16 de diciembre y correrá a cargo de Javier Bueno, director del colegio Santo Tomás. Versará sobre el uso de las tecnologías. A continuación, Javier Suárez desglosa algunos de los aspectos de la salud oral que analizó en el encuentro del edificio de La Ferrería.

Cuidados esenciales. El dentista hace hincapié en la importancia de cuidar la boca casi desde el nacimiento. Recomienda a los padres que limpien la encía del bebé a partir del mes y medio o dos meses de vida con una gasa empapada en agua. Para facilitar esta tarea existen, dice, unos dedales de silicona.

Primera visita al dentista. Suárez indica que a los seis meses, cuando sale el primer diente, es el momento de acudir al dentista "para explicar y enseñar a la madre los cuidados que ha de seguir, cómo limpiar la boca del bebé y para que el niño se vaya haciendo con el ambiente de la clínica dental.

Problemas infantiles. La caries dental es la enfermedad crónica más frecuente de los niños, apunta el dentista, " más que la rinitis o el asma", dice, para explicar que viene motivada por una bacteria que le transmite la madre si no tiene la boca sana. Por ello, "hasta los dos años no es aconsejable que bese en la boca al niño ni limpie el chupo con la saliva a no ser que tenga un cuidado extremo con la boca". Si el bebé recibe dicha bacteria de la madre antes de cumplir los dos meses tiene mas riesgo de padecer caries, que empiezan a aparecer a los seis meses de vida, comenta el dentista. Por ello, añade que, a partir de esta edad, en caso de seguir con la lactancia materna, es recomendable "retirarle la toma nocturna ya que la leche de la madre puede lesionar sus dientes".

Dolencias de los adultos. Si bien la incidencia de caries en la población joven es muy alta, en los adultos no ocurre lo mismo debido a la educación y a unos hábitos más saludables. En los adultos, la enfermedad periodontal es la más habitual, señala Javier Suárez.

Prevenir la caries. La infantil se previene con higiene, limpiando la encía del bebé y evitando la lactancia nocturna a partir de los seis meses. La de adultos, igualmente con higiene, y también con hábitos alimenticios, evitando las comidas azucaradas.

Limpieza de la boca. Debe realizarse veinte minutos o media hora después de las comidas mediante un cepillado continuo durante dos o tres minutos, barriendo el diente en sentido vertical, desde la encía al diente, nunca al revés.

Tipo de cepillo dental. Suárez aconseja el eléctrico para pacientes con discapacidad o dificultad motora y tanto éste como el manual para adultos con coordinación. "Si se utiliza bien el manual, el resultado es el mismo", dice.

Enemigos de la salud oral. Además de los alimentos azucarados, el tabaco y el alcohol ya que influyen en el desarrollo y avance de enfermedades periodontales, comenta el dentista.

Seda dental. Utilizarla al menos dos veces al día y siempre por la noche. Los niños también deben usarla, resalta el dentista. "Cuando salen las muelas y están en contacto unas contra otras, los padres tienen que hacer uso de ella además de supervisar la limpieza hasta los ocho años".

Visita al dentista. Cada seis meses, concluye el especialista.