Las obras de ampliación del centro de salud de Piedras Blancas, que comenzaron hace unos días, tienen enojados a los trabajadores del centro y a buena parte de los pacientes. Todos denuncian constantes ruidos, polvo y el frío durante la jornada laboral. "Los trabajos comienzan a las ocho de la mañana, cuando las consultas y, en vez de ejecutarse durante los fines de semana para agilizar la marcha, sólo se llevan a cabo de lunes a viernes", señaló ayer un afectado.
"Los médicos no pueden auscultar porque, por los ruidos, no escuchan bien los sonidos de los pacientes y algunos trabajadores tiene que estar con el abrigo puesto toda la jornada por el frío que se cuela por las zonas en obras", manifestó un trabajador del centro. Los operarios, los pacientes y los médicos comparten el mismo espacio.
Las obras que está ejecutando el Principado consisten en la redistribución de espacios. Se han eliminado dos baños y se están habilitando dos nuevas consultas y un almacén. El centro de salud atiende a usuarios de todo el concejo y es el único de Castrillón que atiende urgencias hasta las diez de la noche, ya que el consultorio de Raíces Viejo cierra a primeras horas de la tarde. En total, hay ocho médicos para las consultas de Medicina General y Pediatría, con personal de enfermería. Asimismo, hay asistentes sociales, fisioterapeuta, psicoprofilaxis obstetricia y un punto de atención continuada.
Al centro de salud de Piedras Blancas, hay adscritos unos 1.000 usuarios y se realizan más de 7.000 sesiones de rehabilitación al año. La construcción de un nuevo ambulatorio en la capital del concejo o la ampliación del actual era una de las reclamaciones de los usuarios y una propuesta del gobierno castrillonense de IU.
