La asociación de vecinos "Amigos de Salinas" ha exigido al concejal de Medio Ambiente de Castrillón, José Luis Garrido, la limpieza inmediata de la parcela del antiguo hotel Esperanza, ubicado en el centro de la localidad. Los residentes han dado de plazo al gobierno local de IU hasta el inicio de las fiestas navideñas para adecentar la zona y, en caso contrario, denunciarán la situación a Sanidad.

"Es vergonzosa la situación de la acera del antiguo hotel. Por ello, solicitamos con urgencia la limpieza de la zona para las fiestas de Navidad, unos días en los que se esperan muchos visitantes y se encontraran con una zona deplorable", señaló ayer el presidente de la asociación de vecinos, Eloy Martínez Argüelles. "Observamos que se está incumpliendo la ordenanza municipal de Medio Ambiente. No queremos pensar que el concejal la aplica a su gusto, pero lo que está claro es que el gobierno municipal de IU se ha desentendido de Salinas", manifestó el dirigente vecinal.

La situación jurídica del antiguo hotel Esperanza es cada vez más complicada, lo que dificulta la limpieza del solar. La alcaldesa de Castrillón, Yasmina Triguero, envió hace unas semanas requerimientos a la empresa Proescorex (antigua propietaria) y a la Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb) para reclamarles que tomaran medidas urgentes en cuanto a la estabilidad del edificio y a la limpieza del solar.

"Independientemente de quién tiene que limpiar la zona, la concejalía de Medio Ambiente debe tomar las riendas y acometer la limpieza ya. El solar está lleno de basura y de maleza y es un foco de infección, de seguir así nos veremos obligados a denunciar ante Sanidad la situación", afirmó Eloy Martínez.

"Los técnicos municipales han realizado la valoración de las obras que reclamamos a los responsables del hotel Esperanza y que ronda los 15.000 euros", manifestó la Alcaldesa. La rehabilitación del hotel Esperanza comenzó en 2011, pero las obras se paralizan a los pocos meses de iniciarse. Desde entonces, los vecinos se quejan de la suciedad que acumula el solar y de las pocas medidas de seguridad de los restos del edificio como la fachada principal. El inmueble fue construido en 1920 y está incluido en el catálogo urbanístico de Castrillón, un documento pendiente de aprobación desde hace más de diez años.