Papá Noel y el Angulero dejaron buen sabor de boca a los comerciantes avilesinos, pero para la mayoría de los empresarios su economía depende en gran medida de los Reyes Magos. De ahí que muchos hayan escrito cartas a Sus Majestades pidiendo un aluvión de clientes para hacer frente a la inversión en juguetes, detalles y hasta el papel de regalo adquirido especialmente para estas fechas. Pero en vez de ventas, los de Oriente enviaron un aguacero que chafó las expectativas. Las tiendas de Avilés estaban ayer prácticamente vacías, como las calles. ¿El público? "En las grandes superficies donde es sencillo aparcar, hay calefacción y no hace falta paraguas", sentenció Naiara Ruiz, al frente de una zapatería.
Coincidió con esta tendera María Eugenia García del Río, responsable de una juguetería que también decidió abrir las puertas de su establecimiento en domingo. "Este tiempo horrible de lluvia y viento es lo peor que nos puede pasar", dijo. Otra pequeña empresaria también responsable de una juguetería manifestó el "daño" que , a su juicio, hacen las ventas por internet al pequeño comercio. "Se debería regular de una vez por todas", defendió. Los comerciantes se encomendaban ayer a los Reyes para que hoy los clientes regresen a los mostradores.
Las jornadas de hoy y mañana son de ventas, aunque los grandes regalos que entregarán Melchor, Gaspar y Baltasar ya están a buen recaudo. "Son dos días de detalles, de despistes, de olvidos, de últimas horas... Pero todo es bueno para nosotros, lo que necesitamos es que la gente venga al pequeño comercio", subrayó un empresario, que como sus colegas valoró las ventas registradas esta Navidad. "Está cambiando la forma de comprar y eso también hay que tenerlo en cuenta. Muchas personas adelantan las compras a octubre o noviembre, lo que no sucedía antes. También existe cada vez más especialización: antes los Reyes llevaban perfumes o pañuelos y ahora hay tanto donde elegir que el comprador mira mucho y muy bien", agregó.
En lo que coinciden todos los pequeños empresarios es en la importancia del comercio de cercanía, del que viven decenas de familias de la comarca avilesina y que es un importante revulsivo de la economía local. "Si los clientes no vienen a nosotros ganarán los ricos, que se harán más ricos, y los que somos pequeños deberemos cerrar. Así que ojalá los Reyes nos traigan clientes antes y después de su visita", concluyó una empresaria al frente de una perfumería en Avilés.
