El PP ha pedido a la alcaldesa de Castrillón y concejala de Urbanismo, Yasmina Triguero, el desbloqueo de las negociaciones con la Universidad de Oviedo para acometer la rehabilitación del edificio de La Colonia, en Salinas. Los populares reclaman el arreglo del centenario edificio para destinarlo a fines culturales. "El estado del edificio, sobre todo la parte que no ocupa la Cofradía de la Buena Mesa del Mar, es de franco deterioro", señaló el portavoz municipal, Jesús Pablo González-Nuevo Quiñones.

"La Alcaldesa sostiene que hay una partida de un millón de euros en la fundación que gestiona La Colonia y en la que están la Universidad de Oviedo y el Ayuntamiento, pero que su ejecución implicaría, posiblemente, la disolución de la fundación y acarrearía que el Ayuntamiento dejaría de tener alguna competencia sobre la misma, lo que no ve conveniente", censuró el dirigente popular. Y añadió que, después de muchos años de años de parálisis y abandono, es imprescindible llegar a un acuerdo entre los dos organismos afectados para que se acometa la rehabilitación integral del emblemático edificio, cuyo estado de conservación es malo, tanto el del pabellón rehabilitado hace 20 años como los que permanecen cerrados desde 1984.

La rehabilitación del pabellón norte, en 1993, fue inaugurada por el rey Juan Carlos y es la sede de la Cofradía Buena Mesa de la Mar. Desde hace años, la asociación de vecinos "Amigos de Salinas" reivindica la recuperación del edificio.

Las Colonias Escolares Universitarias surgieron en lo que se denominó la "edad de oro" de la Universidad de Oviedo, entre los años 1885 y 1910. Tenían como objetivo el cuidado del desarrollo corporal de los niños y su educación moral en un ambiente apropiado, cercano a un pueblo de mar o de montaña. En el curso escolar 1893-1894, la institución académica asturiana puso en marcha las colonias escolares de Salinas y en Pajares. En 1894, se fundó la Junta de Colonias Escolares de la Universidad de Oviedo, en la que tomaron parte las primeras autoridades académicas, políticas y religiosas. Los niños acudieron a Salinas durante la Guerra Civil española y hasta 1984.