Los usuarios del Centro Niemeyer llevan meses esperando a que se "iluminen de una vez" los accesos al complejo. El lamento viene, sobremanera, desde el final de la pasarela del puerto y hasta la entrada a la plaza. "Cuando anochece tenemos que ir casi a a palpo", se lamentó un usuario. La única iluminación que existe son focos en el suelo que "sólo permiten que tengamos una referencia al caminar, no que podamos ver", añadió el mismo usuario. Los accesos por la "Grapa" tienen el mismo problema: no hay luz. "No puede ser que todavía estemos así", continuó.

El Niemeyer programó anoche la película "El incendio", la segunda del trimestre que acaba de comenzar. Esta misma semana se retoma el ciclo de la palabra con la presencia del novelista Bernardo Atxaga.