El albergue de peregrinos de Avilés cerró 2015 con récord de visitantes. Por las instalaciones municipales pasaron el año pasado 6.402 personas, un 15 por ciento más que en 2014. Las dependencias están regentadas por Asociación Astur-Galaica de Santiago Apóstol. En la última década, la llegada de peregrinos a la ciudad se ha multiplicado por cinco (hubo 1.080 en el año 2004) y por quince si se remonta a los datos de 2002, cuando apenas utilizaron las dependencias 363 personas.

Los peregrinos que eligieron Avilés para pernoctar eran de 58 nacionalidades diferentes, sobre todo, alemanes (1.128), franceses (498), italianos (448) y polacos (289). Los españoles fueron 2.528. La presencia de caminantes extranjeros es cada año más notoria, según resalta el Ayuntamiento. En 2015, el porcentaje de peregrinos procedentes de otras partes del mundo fue del 60 por ciento aproximadamente, frente al 40 por ciento de españoles.

A lo largo de 2015, el mes que más afluencia hubo en el albergue fue agosto, con 1.631 personas, seguido muy de cerca por julio (1.475) y septiembre (1.006). En mayo, hubo 640 usuarios y en junio, 842. Los meses más "flojos" fueron enero y diciembre, con 19 y 26 peregrinos, respectivamente, según los datos que se manejan.

El Ayuntamiento de Avilés, "para dar un mejor servicio a este continuo flujo de peregrinos" acometió obras en el inmueble valoradas en unos 26.000 euros. Los trabajos consistieron en la construcción de una pérgola en el patio exterior, la habilitación de una nueva sala de estancia-comedor y labores de pintura y mantenimiento, entre otras.

Una de las razones de este importante incremento es la puesta en valor del Camino Norte. "El 'Camino de la Costa' está claramente consolidándose como una alternativa al 'Camino Francés' y su reciente designación como patrimonio inmaterial de la Unesco incrementa su interés entre los peregrinos", apuntaron fuentes municipales. Por ese motivo, los responsables del albergue reclamaron hace unas semanas la apertura de más instalaciones municipales a lo largo de la costa asturiana, ya que ahora hay muy pocos y espaciados.