La obesidad es ya una pandemia no infecciosa y cada vez más los niños sufren sus consecuencias negativas para la salud. En Avilés, tres de cada diez menores de catorce años sufre exceso de peso y el 2,2 por ciento de los pacientes pediátricos del área sanitaria presentan un nivel grave. Las cifras son ligeramente superiores a la media regional, de acuerdo al estudio "Estado nutricional de la población infantil en Asturias" auspiciado por la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria. Por sexos, la tasa de obesidad es mayor en niños que en niñas. Y por edad, el exceso de peso es mayor en los pequeños de entre 10 y 14 años, mientras que los de entre cinco y nueve presentaron las mayores tasas de obesidad y obesidad grave.
Por zonas básicas de salud (el área sanitaria de Avilés está dividida en las de Sabugo, Quirinal, La Magdalena, Villalegre, Corvera, Cudillero, Pravia, Castrillón, Luanco y Llano Ponte) llama la atención que la mayoría de estos centros supera la media de Asturias respecto a las tasas de exceso de peso, obesidad y obesidad severa. Así, por ejemplo, el de Sabugo está en el puestos 41 de 68 (el 1 corresponde a las menores tasas y el 68 a las mayores), el de La Magdalena en el 49, el de Corvera en el 50, Cudillero en el 63 y Luanco en el 55. En el otro extremo, con tasas por debajo de la media regional, están los pacientes pediátricos de los centros de salud del Quirinal (puesto 22), el de Llano Ponte y Castrillón.
La obesidad tiene numerosas enfermedades asociadas, según alertaron recientemente los pediatras del Hospital San Agustín. "Últimamente, y cada vez más, llegan niños con problemas de hipertensión, diabetes de tipo adulto, apnea del sueño, problemas respiratorios o hipercolesterolemia", manifestó un profesional del complejo sanitario avilesino. El estudio "Estado nutricional de la población infantil en Asturias" permitirá a los pediatras de Atención Primaria especialmente realizar un diagnóstico precoz de las alteraciones de nutrición así como planificar y priorizar estrategias de intervención.
En el estudio participaron, en total, 89.989 niños asturianos menores de 14 años, 14.618 de ellos del área sanitaria avilesina nacidos entre enero de 1995 y marzo de 2012. Los resultados del trabajo permitieron a los profesionales destacar que no hay indicios de patología por desnutrición en la población infantil asturiana. Un 1,1 por ciento de la muestra presentó bajo peso y bajo índice de masa corporal, lo que los médicos atribuyeron a "patologías crónicas, antecedentes de prematuridad...". La conclusión del trabajo es la existencia de una alta prevalencia de exceso de peso, con una distribución muy heterogénea entre áreas sanitarias y zonas básicas de salud. A la hora de realizar el informe, los profesionales desconocían datos socioeconómicos o familiares que pudieran esclarecer las causas del exceso de peso. "La localización geográfica permite intuir que las zonas rurales y más aisladas presentan unas cifras claramente peores", señalan en el trabajo.
En relación con la obesidad, el servicio de pediatría del Hospital San Agustín, en colaboración con los colegios del Quirinal y Villalegre, puso en marcha un programa de prevención en el que se desarrollaron estrategias dirigidas a mejorar la actividad física, disminuir las actividades sedentarias y mejorar los hábitos de alimentación de los escolares mediante talleres prácticos con los niños, reuniones con los profesores para que estos desarrollaran conceptos saludables en el aula y reuniones informativas sobre los mismos aspectos dirigidas a los padres de los alumnos de primero a quinto cursos de Educación Primaria. Según explicó en su día el pediatra Juan J. Díaz Martín, al finalizar el proyecto, los niños del Colegio Villalegre (grupo de intervención) habían mejorado significativamente su índice de masa corporal y la calidad de su dieta.
