Dice un aserto popular que quien va a Santiago y no al Salvador, visita al criado y no al Señor. La frase, la mejor publicidad que se pudo hacer en su momento para incluir a la catedral de Oviedo en el itinerario del Camino Francés a Santiago (el que discurre por León), tuvo que ver en su origen con la posibilidad de contemplar numerosas reliquias en la capital asturiana, entre las que destaca el Santo Sudario de Cristo y un fragmento de la Vera Cruz. Avilés no se queda atrás y también defiende, en pleno furor por la peregrinación a Santiago de Compostela, razones de peso para que los peregrinos en tránsito a Galicia -en su caso siguiendo el llamado Camino Norte o de la Costa- hagan un alto en su ruta y se empapen de historia, religiosidad y arquitectura, allá cada cual con sus preferencias. La propuesta la lanza el párroco de Santo Tomás de Cantorbery, José Antonio González Montoto, y consiste en recomendar una visita a la iglesia ahora nombrada como San Antonio de Padua -antes fue de los Padres Franciscanos- para adorar el Sagrado Corazón, amén de dejarse envolver por las piedras del edificio que es tenido por la construcción más antigua que se conserva en pie en Avilés (data del siglo XII).

"Mi recomendación, que se puede hacer extensiva a la capilla de La Luz, donde se rinde culto a la patrona de Avilés, o a la iglesia románica de la plaza del Carbayo tiene que ver con la posibilidad de adorar al Señor a través de la Sagrada Forma tanto de día como de noche y enriquecer la experiencia del Camino a Santiago con una visita al templo más antiguo de Avilés y uno de los más vetustos de Asturias", explica González Montoto, quien esta tarde participará, junto a otros ponentes, en un acto del Club LA NUEVA ESPAÑA de Avilés que lleva por título "Año jubilar de la Misericordia y caminos de Santiago". La mesa redonda comienza a las 20.00 horas en la Casa de Cultura.

González Montoto subraya que el templo de la plaza de Carlos Lobo es el único de la ciudad que se caracteriza por tener un régimen de adoración de la Sagrada Forma que prácticamente abarca las 24 horas del día los 365 días del año, consecuencia de la implantación el pasado mes de julio de turnos de adoración y custodia al cargo de feligreses de la parroquia.

El párroco de Sabugo prevé para el año en curso un nuevo aluvión de peregrinos de paso por Avilés camino de la tumba del apóstol Santiago, un convencimiento que tiene que ver con la declaración por parte del Papa Francisco del Año de la Misericordia; es decir, un periodo jubilar en el que los penitentes podrán ganar la indulgencia plenaria con el cumplimiento de tres requisitos: tener voluntad de conversión, rezar por el papa y hacer una peregrinación. En el caso de Asturias, los tres destinos que sirven para peregrinar en pos de la indulgencia de los pecados son el santuario mariano de Covadonga, la catedral de Oviedo y la parroquia del Sagrado Corazón de Gijón. "Avilés no está en esa lista y no es que el Arzobispo, que es quien la elabora, no nos quiera sino que hay que ser cabales: tampoco es tan complicado peregrinar a cualquiera de los destinos propuestos...", comenta el sacerdote.