La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

"Pido una cirugía sin sangre y me mandan a San Sebastián", critica un castrillonense

El Sespa comunicó a Fernando Ovies, testigo de Jehová, que ese tipo de operaciones no es posible en Asturias

Fernando Ovies, el viernes, en Piedras Blancas. MARA VILLAMUZA

Fernando Ovies, un vecino de Piedras Blancas que debe ser operado para instalarle una prótesis de cadera, ha sido derivado a San Sebastián, concretamente al Hospital Donostia, tras esperar 11 meses a ser llamado para la intervención, que estaba prevista en el Hospital San Agustín de Avilés. Fernando Ovies no quiere pensar que su condición de Testigo de Jehová y el haber solicitado una operación "sin sangre" sea la causa de su obligado desplazamiento a la capital donostiarra.

"Hice todos los trámites en febrero de 2015 para que me operaran en el Hospital San Agustín, ya sabían que sin la utilización de sangre, igual que ocurrió en otra intervención hace dos años. El hospital envió mi expediente al Servicio de Salud del Principado de Asturias (Sespa) y ahora me llega la comunicación de que me tengo que operar en el Hospital Donostia porque en el San Agustín no hay unidad para intervenciones sin sangre", explica Ovies.

Los testigos de Jehová rechazan las transfusiones de sangre principalmente por sus principios bíblicos relacionados con el "abstenerse de sangre" y el uso que se le debe dar a la misma, registrado tanto en las escrituras hebreas como en las escrituras griegas cristianas, específicamente en los libros "Deuteronomio" y "Hechos de los Apóstoles".

Fernando Ovies, de 57 años, está jubilado de la banca, casado y con dos hijos que ya están emancipados. "Coticé a la Seguridad Social durante 28 años y creo que tengo derecho a que me operen en el hospital más cercano a mi domicilio. Es una comedia lo que pasa en este país y más por tener una confesión religiosa concreta", indicó.

El paciente castrillonense está a la espera de que el Hospital Donostia le confirme la intervención y la fecha de la misma. "Que me desvíen a San Sebastián tiene para mi familia un coste que la Seguridad Social no va a asumir. Por una parte yo tengo que pagarme el viaje de ida y vuelta a San Sebastián y el de mi mujer, que me acompañará para atenderme en el hospital. Además, tenemos que pagar la estancia de mi esposa, la comida y todos los gastos que conlleva el desplazamiento", se queja.

Ovies sostiene que en todo el mundo hay unidades hospitalarias para intervenciones sin sangre y no se explica que ahora le digan que en Asturias no hay ningún centro sanitario que pueda realizarle a él la intervención. "Si en el San Agustín no me pueden operar debería poder ser en el Hospital Central Universitario de Asturias (HUCA). Hay un comité de testigos de Jehová de apoyo a los hospitalizados pero no entiendo lo que me está pasando", dijo.

"He pedido al Sespa que, al menos, financien la estancia de mi mujer en San Sebastián porque yo no he pedido ir allí; pese a que ellos me dicen que fue idea mía, puedo asegurar que mi desvío al Hospital Donostia se tramitó desde el Hospital San Agustín pues yo llevo desde febrero de 2015 esperando que me llamen para operarme en Avilés", afirma.

Fernando Ovies asegura que la ultima operación que le realizaron hace unos años en el San Agustín se desarrolló sin ningún problema. "La intervención fue en septiembre de 2014 y me trataron de maravilla, sin ningún problema. Ahora me dicen que ni el San Agustín ni el HUCA están preparados para operaciones sin sangre. Temo que todo esto sea por mis creencias religiosas", señala Ovies. El paciente castrillonense espera ahora noticias del Hospital Donostia para operarse en San Sebastián.

Compartir el artículo

stats