La Policía Local de Avilés detuvo en la madrugada del miércoles, diez minutos antes de la una, a un avilesino de 44 años por un delito contra la seguridad vial al circular supuestamente bajo la influencia de bebidas alcohólicas. El hombre detuvo su coche en mitad de un carril y frente al semáforo de la calle Pruneda que regula el acceso a la calle Marcos del Torniello cuando se durmió al volante, según medios policiales. Los agentes lo hallaron somnoliento en el interior del vehículo.

El conductor, conocido por los agentes avilesinos como autor de otros delitos similares, quintuplicó la tasa máxima de alcohol permitida al volante, según fuentes policiales. De ahí que el delito será juzgado por vía penal. Las tasas de alcohol en aire espirado superiores a 0,60 miligramos por litro o de 1,2 gramos por litro en sangre son castigadas con penas de prisión de tres a seis meses, multas de seis a doce meses o trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días. Asimismo, los conductores se enfrentan en este supuesto a la privación del derecho a conducir entre uno y cuatro años.