La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

FIDEL ÁLVAREZ GARAOT | Presidente de la Cofradía de Pescadores "Virgen de las Mareas", la entidad que aspira a asumir siete años después la gestión de la rula de Avilés

"Los gallegos están frotándose las manos con los líos de la rula de Avilés"

"Las cosas con Hacienda no se pudieron hacer peor; para evitar problemas penales dejaron con el culo al aire a los armadores y comercializadores"

Fidel Álvarez Garaot. MARA VILLAMUZA

Fidel Álvarez Garaot (Oviñana, Cudillero, 1975) se ha ganado fama en los últimos años como plusmarquista del bonito -es el armador que más arriesga para capturar el "campanu" del mar-, pero aparte de esa faceta que le ha dado popularidad lleva dos años desempeñando un trabajo arduo, "resucitar" a la Cofradía de Pescadores "Virgen de las Mareas", que tenía un "agujero" económico de 1,5 millones cuando tomó sus riendas, poco futuro y una imagen arruinada por los escándalos del pasado. La cuestión financiera ha mejorado, asegura. La cuestión de la imagen sigue siendo una asignatura pendiente; un ejemplo: ha bastado que la Cofradía exponga su deseo de asumir la gestión de la rula para que desde ciertos sectores pesqueros y medios socialistas lluevan críticas por la desconfianza que inspiran los rectores de la entidad.

-¿Por qué la Cofradía plantea justamente ahora su deseo de asumir la gestión de la rula?

-La voluntad de la Cofradía siempre ha sido, desde que se fundó hace 70 años, gestionar la comercialización del pescado. En 2009 la perdimos porque el Puerto y el Principado se encapricharon en quitárnosla y lo lograron. Cuando llegué a la presidencia en 2014 encontré un panorama financiero desolador, con una deuda de 1,5 millones. Determinamos que lo urgente era salvar la entidad de la quiebra que la amenazaba y así emprendimos un plan que ha permitido reducir la deuda a 250.000 euros a día de hoy. Menos apretados por la deuda el mundo se ve de otra manera, y como la deriva que lleva la rula es desastrosa decidimos dar una paso al frente para evitar su hundimiento. Acudimos a su rescate porque tememos que se vaya al garete.

-¿Reivindica la gestión de la rula que hizo en tiempos la Cofradía?

-Totalmente.

-¿Y eso por qué?

-Porque la Cofradía, más allá de vender pescado, daba la cara por el sector pesquero, era protagonista de la política pesquera. Y si de la venta de pescado hablamos, Hacienda jamás encontró en la rula chanchullos ni fraudes ni trampas en todo el tiempo que la Cofradía fue la gestora. Pero ha bastado que la cojan otros para que en apenas cuatro años caigan con todo el equipo y le metan una avería de más de un millón de euros que pagaremos todos los usuarios. Salta a la vista quién lo ha hecho bien y quién mal.

-Ya que lo menciona, ¿cómo se enteró la Cofradía de la inspección fiscal a la rula?

-Por los empleados.

-Pero ustedes forman parte del consejo de administración...

-Compartir la información no es lo habitual en ese órgano.

-Vale, se enteran de la inspección. ¿Y luego qué?

-Pedimos explicaciones al gerente (Ramón Álvarez), que se limitó a tranquilizarnos, decirnos que no pasaba nada, que era algo rutinario y que todo estaba OK.

-Pero la cosa acabó fatal: una sanción de 1,2 millones de euros.

-Y eso no es lo peor.

-¿Ah, no?

-No, lo peor es que los armadores y los comercializadores quedamos con el culo al aire. Al reconocer los hechos (ocultación de ventas) e incluso documentarlos ampliamente, ¿qué defensa tienen ahora a quienes vendieron y compraron? La actual posición del resto de investigados es de absoluto desamparo, y todo por culpa de la negativa de la sociedad de la rula a negociar con la Agencia Tributaria, como hizo la rula de Gijón -también investigada- para lograr una salida airosa para todas las partes. Y mira que les avisamos... pero nada, ni caso nos hicieron.

-¿Por eso abandonó la Cofradía el consejo de Nueva Rula de Avilés?

-Conste que primero renunciaron las dos consejeras que había puesto el Principado, Tomasa Arce y Begoña Fernández. El porqué de su huida es algo que aún nadie ha explicado. Los miembros de la Cofradía dejamos el consejo porque no se nos escuchó, porque se nos negó información y porque nos dimos cuenta de que aquello se había convertido en coto privado de los políticos. Se hacía su santa voluntad y a ese juego la Cofradía no se presta.

-¿Qué hubiera hecho la Cofradía para minimizar el palo de la inspección de Hacienda?

-Negociar y pactar; asumir la comisión de un fraude y regularizar las cuentas, bajo ningún concepto darle carta blanca a Hacienda con tal de evitar la apertura de diligencias penales.

-¿Cree que hubo miedo a las consecuencias penales del delito cometido?

-Sin ningún género de duda.

-¿Cuántos armadores y comercializadores de la rula están "pillados" por esta investigación del Fisco?

-Sobre el 90% de los que hicieron operaciones en la rula en aquellos años (de 2009 a 2012).

-El antiguo gerente dimitió y hay uno nuevo, ¿es la solución?

-Esto no lo arregla un cambio de gerente y menos si el que viene es fruto de una operación política teledirigida. El que manda de verdad en la rula es Santiago Rodríguez Vega (presidente del Puerto de Avilés) con la complicidad de Alberto Vizcaíno (director general de Pesca) -o sea, el PSOE- y mientras eso sea así la rula no tiene arreglo.

-¿Tan mal va la rula como para plantear su rescate?

-Recibe menos barcos, y por tanto menos pescado... La fuga de armadores a otros puertos no ha dejado de aumentar en estos años, y más que se irán pronto si esto no cambia. El pasado mes de enero, sin ir más lejos, la cifra de negocio fue la segunda peor de la historia. Francamente, peor no puede ir.

-¿Cuáles son las bazas de la Cofradía para revertir esta situación?

-Me permitirá que, tal y como están las cosas, me reserve de momento dar a conocer cuál es nuestra estrategia.

-Hombre, unas pinceladas generales al menos...

-Mire, todo pasa por hacer las cosas pensando en los intereses de quienes pescan y quienes compran el pescado, que se sientan protagonistas de la gestión, que se les escuche y tratar de solucionar sus problemas, no de creárselos. Es así de sencillo. Con la que le está cayendo al sector pesquero -cupos, inspecciones, normativas, vedas...- como para además tener al enemigo metido en casa, o sea, en nuestra rula. Respecto a la plantilla, nuestro compromiso es mantener el empleo.

-¿Podría la Cofradía hacerse con la mayoría del capital de la rula?

-A ver, a ver, vamos por partes. Para que la Cofradía compre las acciones primero tienen que darse dos premisas: que el precio sea el justo -para eso hemos pedido que se haga una tasación independiente- y que un plan de viabilidad determine que la instalación tiene futuro. A lo mejor a la Cofradía acaba por no interesarle la operación, ¿entiende? Es que la hipoteca que tiene ahora mismo la rula con el tema de Hacienda es muy gorda...

-Pero tienen ustedes dinero para la inversión, ¿sí o no?

-Más de un banco se ha ofrecido a prestárnoslo; eso no es problema.

-¿Qué cree que pasará si no cambia el modelo de gestión de la rula avilesina?

-Que acabará cerrada o reducida a una anécdota, como le pasó a la de Santander.

-¿Eso beneficaría a alguien'

-A rulas gallegas como la de La Coruña y Burela y puede que, en menor medida, a la de Gijón. Los gallegos, que sí que saben hacer las cosas, están frotándose las manos con los líos de la lonja de Avilés. Que nadie lo dude: a río revuelto, ganancia para los gallegos.

-Alberto Vizcaíno manifestó dudas sobre la hipotética toma de control de la rula por parte de la Cofradía dada la desconfianza que ésta le inspira; ¿son ustedes gente de fiar?

-Ya, y eso lo dice Vizcaíno, que ocupa un cargo en el consejo de la rula de Avilés a todas luces incompatible con la defensa del interés general de la pesca asturiana que debe ejercer en su calidad de director general de Pesca.

Compartir el artículo

stats