"Corvera se enmarca en las tasas de delincuencia del Principado, que son razonables, más bien positivas, bajas. Es un sitio seguro", explicó ayer el alférez Iván Quirós, que se encarga de coordinar los dispositivos de la Guardia Civil de la comarca, aunque matizó que Las Vegas y Los Campos, pueden "dar más picos de trabajo al tratarse de zonas periurbanas".

Lo hizo aprovechando la visita de varios miembros de la Guardia Civil al colegio de Cancienes. Más de cien niños disfrutaron aprendiendo cómo trabajan grupos como el de desactivación de explosivos o el servicio cinológico, que trabaja con los perros de rastreo. "Lo que más les gusta es subirse a los coches y hacer sonar las sirenas, además de ver como trabajan los perros", explicó Quirós. Más de uno de los pequeños se llevó un buen susto cuando un agente desactivo un pequeño "explosivo" en medio del patio.