El titular del juzgado de instrucción número 5 de Avilés, Julio Martínez Zahonero, comenzó a tomar declaración ayer a testigos en el marco de la investigación del crimen del Carbayedo. La sorpresa vino de la mano de una camarera. Aseveró al juez que atendió a Julio Pardo, marido y presunto asesino de Ascensión (Susi) Amores, un día después del crimen, explicaron fuentes próximas al caso. Esta testigo, trabajadora de la cafetería de la estación de servicio de La Maruca, había dicho en un principio a la Policía que sirvió a Julio Pardo a primera hora de la madrugada del 26 de enero (Susi Amores falleció en torno a las cuatro y media de esa madrugada, según las primeras investigaciones). Según la versión que ofreció ayer esta mujer, el pastelero habría salido de su piso del Carbayedo tras matar presuntamente a golpes en la cabeza a su mujer.
El propio Julio Pardo había asegurado haber pasado por la cafetería de esta estación de servicio antes del crimen. Agentes de la Policía Nacional acudieron a la gasolinera para recabar pruebas y comprobar la versión del presunto asesino. Los agentes se llevaron las grabaciones de las cámaras de seguridad de la estación de servicio para su análisis, pero en ellas no aparece Julio Pardo, según fuentes de la investigación. También pasaron ayer por el juzgado de instrucción número 5 de Avilés un hermano de la víctima y un vecino del matrimonio que oyó a Susi Amores gritar. Este último expuso exactamente lo mismo que declaró a este periódico y a la Policía Nacional tras trascender el crimen: "Me desperté sobre las cuatro de la madrugada del lunes al martes por los gritos de la vecina de arriba. Decía ¡Julio, Julio, esto no me lo hagas! Al escucharla chillar, lo primero que pensé es que el hombre se había suicidado. Después, oí gritos como de desesperación, ruidos como de caerse cosas. Fueron como unos quince minutos y no supe nada más".
Susi Amores falleció en la madrugada del 26 de enero en su piso del Carbayedo. Las fuerzas de seguridad localizaron el cadáver casi dos días después. En el interior también estaba su marido, ahora en prisión provisional.
