Los diez alumnos de la escuela infantil de Gudín tienen asegurado un desayuno equilibrado, al menos, durante esta semana. Los pequeños, de 3 y 4 años, abren el día comiendo lo que todos los médicos recomiendan en el centro: zumo de naranja y fruta (plátano, pera y manzana), embutido (pechuga o jamón york) y queso, y leche con cacao, galletas y cereales. "La actividad se desarrolla en cuatro días y todos asisten a los cuatro. Coincide con la entrada a la escuela, solo tienen que traer una taza de plástico y aquí ponemos el resto", explica el director, Berto García.

Ayer fue el segundo día que los pequeños desayunaron en la escuela. "La primera jornada siempre les cuesta un poco, pero con el tiempo comen más. Los padres nos comentan que hay cosas que en casa no son capaces de que las coman y aquí no hay problema", señala el director. García cree que comer con otros niños invita a disfrutar más del desayuno y anima a los pequeños a conocer alimentos que normalmente no comen. "Les encanta. Eso de desayunar con los amigos les gusta mucho. Y la verdad es que comen, comen muy bien teniendo en cuenta que son niños tan pequeños", afirma.

Esta actividad se complementa con otras dos que realizó el centro educativo en enero, los talleres "Duende Nomedalagana", relacionado con los hábitos saludables como el ejercicio, y "La conquista de la boca sana", para la higiene bucodental de los pequeños. "Es muy importante que ya desde pequeños aprendan y tengan un estilo de vida saludable, que les ayudará mucho de más mayores. Por eso, estamos haciendo estas actividades, para colaborar con lo que aprenden en casa con sus padres", comenta el director de la escuela.